Una nueva ola de calor puso en jaque al sistema eléctrico nacional este lunes, con cortes masivos que dejaron sin luz a miles de usuarios en Córdoba y varias provincias del norte argentino.
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La demanda de energía rozó niveles récord, superando las previsiones de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), que ya había anticipado un pico histórico de consumo.
En Córdoba, el corte se produjo alrededor de las 14:40, afectando a gran parte de la provincia. Según fuentes de la Secretaría de Energía, el problema se originó por la salida de servicio de seis líneas de 132 kilovatios de la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (EPEC).


Cortes de luz en Córdoba y el norte: miles de usuarios sin servicio eléctrico
En las redes sociales, EPEC informó: “Estamos trabajando para determinar las causas de las fallas en las restricciones del servicio”.
Pero Córdoba no fue la única afectada. En el noreste argentino (NEA), un colapso de tensión de aproximadamente 1.000 megawatts (MW) dejó sin electricidad a provincias como Formosa, Corrientes y Chaco.
Según fuentes oficiales, el problema se originó por la desconexión de un transformador en Formosa. Además, en el noroeste (NOA), Tucumán, Santiago del Estero, Jujuy y La Rioja también reportaron cortes significativos.
En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), más de 20.000 usuarios se quedaron sin luz. Según datos del Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), a las 16 horas había 13.605 clientes de Edesur y 6.959 de Edenor afectados.
El sistema eléctrico nacional estuvo al borde de superar el récord de consumo registrado el 1° de febrero, cuando se alcanzaron los 29.653 MW.
Este lunes, el pico se esperaba entre las 14 y las 15 horas, pero la caída en el NEA y los problemas en Córdoba impidieron que se concretara.
Aunque las altas temperaturas seguirán durante los próximos días, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anunció un alivio a partir del martes, con lluvias y un descenso en la temperatura que se extendería hasta el fin de semana.
A pesar de esto, los expertos advierten que el sistema eléctrico seguirá bajo presión, especialmente en febrero y marzo, cuando el consumo suele alcanzar sus niveles más altos.