En las últimas horas, investigadores del CONICET denunciaron la cancelación de más de 200 becas postdoctorales por parte del Gobierno, que finalizan el 31 de julio próximo.
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Esta decisión generó preocupación entre los científicos afectados, quienes enfrentarán una pausa en su empleo hasta la próxima evaluación de nuevas becas, que se realizará el año entrante.
Según Nuria Giniger, investigadora de CONICET y dirigente de ATE CONICET, “habrá un espacio temporal de más o menos un año en donde tenemos más de 200 investigadores formados que no van a tener trabajo”. Tal medida, que ya fue oficializada por las autoridades del organismo, fue ampliamente criticada por la comunidad científica.
Un golpe duro para la investigación en Argentina con nuevos despidos en el CONICET
Ante esta alarmante situación, CONICET Capital también emitió un comunicado en el que destacan que “este golpe se enmarca en un contexto institucional del complejo de CyT nacional caracterizado por despidos, desfinanciamiento, desmantelamiento, degradación de competencias y capacidades de gestión”.
Además de esta medida, el recorte en el financiamiento para becas doctorales, que redujo el número de ayudas de 1.200 a 700 a principios de año, ya había causado malestar. También se disminuyó la cantidad de becas en la nueva convocatoria, de 800 a 500.
Para expresar su rechazo, los investigadores de ATE convocaron una jornada de protesta nacional. Esta incluye banderazos, conferencias de prensa y concentraciones en distintos centros científicos y tecnológicos a lo largo del país.
Despidos masivos en el Hospital Posadas: incluyeron a una bióloga molecular
El fin de semana pasado, el Hospital Posadas notificó el cese laboral a 88 empleados, muchos de ellos médicos especialistas, asistentes sociales y laboratoristas, como parte de la segunda tanda de despidos en el sector público promovidos por el Gobierno de Javier Milei.
Según el Ministerio de Salud, los despidos se deben a incumplimientos en el presentismo, una afirmación que los trabajadores afectados rechazan.
Una de las personas despedidas es una bióloga molecular que trabaja en la detección y seguimiento de pacientes con leucemia y linfoma, una especialidad crítica en el hospital. La bióloga, que solicitó el anonimato, explicó: “No sé bien por qué. Quizás porque mi mamá falleció de linfoma".
Siguen las bajas en el sector público: una bióloga molecular entre los afectados
La especialista despedida había ingresado al Posadas en 2013 y, desde la jubilación de su jefa en 2021 y la renuncia de una colega en 2022, era la única encargada de procesar muestras para estos diagnósticos. Su trabajo consistía tanto en confirmar diagnósticos como en realizar el seguimiento de pacientes en tratamiento.
El Posadas, al igual que el Hospital Garrahan, es un centro de referencia nacional en hemato-oncología adolescente desde junio del año pasado. La bióloga molecular despedida desempeñaba un papel muy importante en esta área. Sin embargo, en la tarde del lunes circulaban rumores de que las autoridades del hospital reconsiderarían su situación.
Aunque desde la dirección del hospital aseguraron que el equipo estaba formado por cinco profesionales, se argumentó que los otros miembros del grupo tenían especialidades distintas.
En marzo, la bióloga notó que le descontaron 40 horas de trabajo sin motivo aparente. “Jamás falté”, afirmó. Durante más de una década, firmó contratos anuales, pero en enero le renovaron por solo tres meses. Además, denunció irregularidades en su categoría salarial y descuentos de horas no justificadas, por lo que reclamó sin obtener respuesta.
“Quizás se hayan basado en dos semanas en que llegué tarde. Tuve la adaptación al jardín de mi hija de 3 años, algo que está permitido específicamente y por lo que presenté todos los papeles para su justificación”, comentó.
