Durante la noche del viernes, en la parrilla “El Nuevo Miguelito”, famosa en el barrio porteño de Parque Chacabuco por ser frecuentada por hinchas de San Lorenzo, irrumpieron ocho delincuentes armados que, con mucha violencia, asaltaron a las 60 personas que había en el local, entre comensales y empleados.
En vísperas del "Día del Amigo", y aprovechando que la Ciudad de Buenos Aires es tierra de nadie, donde los robos son cada vez más frecuentes, estos delincuentes se llevaron celulares, dinero en efectivo y cadenas de oro. No solo fueron por lo material, sino que también golpearon algunas de las víctimas.
El asalto en el distrito perteneciente al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, duró unos diez minutos y quedó registrado por una de las cámaras de seguridad del local. Se inició poco después de las 23, cuando los asaltantes llegaron en un antiguo Ford Escort y en primer lugar abordaron a los comensales que se encontraban en las mesas situadas en la vereda.
En medio de la confusión, algunos de los damnificados consiguieron avisar al interior del local, mientras que empleados y algunos clientes pudieron refugiarse en los fondos del restaurante.
Cómo fue el violento asalto en un restaurante repleto de comensales en CABA
Los asaltantes lograron despojar a varios clientes de billeteras, alhajas de oro, celulares y en algunos de los casos, mientras que también le pegaron un culatazo a uno de los clientes para amedrentarlo.
"Me pegaron un culatazo en la nuca para apurarme, aun sin haberme resistido”, contó una de las víctimas a Infobae para graficar la violencia con la que actuaron los delincuentes. El caso es investigado por la Justicia Federal y fue caratulado como “robo a mano armada”.
El cliente contó que muchos corrieron hacia el fondo para evitar el robo, pero cuando intentó hacerlo ya era tarde. “Entonces, me quedé sentado donde estaba. Tengo amigos que se tiraron al piso y les apuntaron, una imagen horrible. Había nenes en el medio de todo eso”, recordó.
Además, narró que, apenas ingresaron al local, uno de los ladrones le dijo a su cómplice: ‘Agárralo a este que está lleno de oro’. Los asaltantes revisaron una por una a las personas que estaban en la parrilla, no menos de 60: “Les iban sacando teléfonos, anillos, cadenas, todo... Mínimo diez minutos para trabajar tuvieron. Los que lograron escapar llamaron a la Policía y, así y todo, llegaron cinco minutos después de que ya se habían ido”.
Entre los que perdieron sus pertenencias se encontraba él, a quien golpearon para que entregue rápido su celular: "Lo único que hacía era mirar para abajo y decir que sí, porque no quería ver las armas. Y, de hecho, me pegó en la cabeza", contó el hombre golpeado.
Tras el escape de los delincuentes, algunos presentes en el lugar hablaron de algo "inusual" en el hecho.
"No es ilógico pensar que el Día del Amigo podía estar lleno el lugar, pero es raro que se la jueguen así, siendo tantos. Incluso, había quienes sospechaban de barrabravas, porque al día siguiente jugaban el clásico San Lorenzo-Huracán", expresó uno de los comensales damnificados.