Este viernes, a un día de cumplirse un mes del intento de asesinato a Cristina Fernández de Kirchner, la jueza federal María Eugenia Capuchetti tomó la decisión de procesar a Nicolás Gabriel Carrizo, el líder de La banda de los copitos, y a Agustina Díaz, amiga íntima de Brenda Uliarte, como partícipes secundarios del plan del atentado contra la vicepresidenta. La letrada los embargó a cada uno por 100 millones de pesos y dispuso que sigan detenidos con prisión preventiva.
La jueza afirmó: "Quedó demarcada la intención previa, preordenada y directa que han tenido los imputados de acabar con la vida de la víctima". De acuerdo al fallo, Sabag Montiel y Uliarte podrían haber llevado adelante el asesinato de la titular del Senado, pero tanto Carrizo como Díaz tenían conocimiento pleno de las intenciones de sus amigos y de hecho volvieron a interactuar con Brenda una vez arrestado "Nando".
Tras la reconstrucción de los hechos, Capuchetti sostuvo: "Los sucesos del 1° de septiembre fueron el capítulo final del plan delictivo que previamente habían acordado, diseñado y estudiado Brenda Elizabeth Uliarte, Fernando André Sabag Montiel, Nicolás Gabriel Carrizo y Agustina Mariel Díaz".
Se filtraron más chats de Fernando Sabag Montiel: "Yo a ella la trato de bajar, pero a mi me importa la plata"
La querella de la defensa de Cristina Fernández de Kirchner, solicitó que se investiguen los supuestos móviles económicos que motivaron el intento de atentado contra la vida de la vicepresidenta. Según informaron fuentes judiciales, este pedido de la querella, se dio luego de que se dieran a conocer en el marco de la causa, mensajes de Whatsapp, de Fernando Sabag Montiel, principal autor material del hecho.
En dichos mensajes, Sabag Montiel manifestaba la voluntad de ejecutar el magnicidio a cambio de dinero. En un escrito presentado en estricta reserva por los abogados, Marcos Aldazabal y José Manuel Ubeira, solicitaron que se profundice esa línea de investigación y requirieron que se lleve adelante un exhaustivo análisis de los diálogos que mantuvo Brenda Uliarte, pareja de Sabag Montiel, antes de ser detenida.
Los abogados detectaron un diálogo de Sabag Montiel en un grupo de Whatsapp, en donde el día 15 de agosto pasado, afirmaba: "Yo quisiera hacerme el vendedor de copos y meterle un corchazo".
En esa misma conversación, y al referirse a su pareja Brenda Uliarte y sus planes magnicidas, Sabag Montiel escribió: "Yo a ella la trato de bajar, pero a mi me importa la plata, si nos compran o le dan un laburo, ya está salvada, bienvenido sea".
Esta línea de investigación de las motivaciones económicas de la "Banda de los Copitos", y sobre todo del propio Sabag Montiel, se ve reforzada por otro mensaje, encontrado en el celular de Gabriel Carrizo, quien es sindicado como el líder de la banda y que se halla detenido bajo prisión preventiva.
En ese mensaje, Carrizo recibe un texto de un número de celular, agendado como "Joa", que dice así: "Se que lo hizo por plata, por acomodo, así que el chabón en cuatro años ponele que sale y sale re acomodado mal eh… a ver, como les vuelvo a repetir, uno por plata se vende ¿si? Pero si, si los nombro a ustedes, eso si así que fíjense bien… y no solo a ustedes cinco porque nombro a mas personas, fíjense bien".
El mensaje además resulta llamativo por su tono de amenaza, en donde plantea la posibilidad de nombrar a otros supuestos implicados en el hecho que investiga la jueza María Eugenia Capuchetti.
Más conversaciones que llaman a profundizar la investigación
Otra conversación en la que se basaron los abogados de la titular del Senado, Aldazabal y Ubeira para pedir que se abrieran otras líneas de investigación tiene que ver con una que se dio entre Uliarte y una persona a la que tenía agendada como "David", horas antes de ser detenida.
"Ya que vos me contaste algo y sos una persona para confiar, yo te confieso algo mío ultra secreto", le escribó "David" a Uliarte el 4 de septiembre al mediodía. Acompañó ese texto con una foto y el texto "No se lo cuentes a nadie".
