Todo el mundo del fútbol quedó temeroso y expectante tras la dura imagen que se vio en la Eurocopa 2020. Cuando se jugaba el primer partido del Grupo B entre Finlandia y Dinamarca, Christian Eriksen se desplomó y cayó inconsciente al suelo. Inmediatamente, el partido se detuvo, el arbitro y los jugadores llamaron a los médicos que comenzaron a realizar maniobras de resucitación sobre el volante. Mientras los profesionales trabajaban, su pareja ingresó al campo de juego desesperada.
Sabrina Kvist Jensen, es la esposa de Eriksen, que no podía creer lo que sucedía. Desconsolada, rompió en llanto e intento acercarse a su marido, pero era detenida por un personal de la seguridad. El arquero danés, Kasper Schmeichel y el capitán, Simon Kjaer, se acercaron para tranquilizarla. Sabrina y el futbolista del Inter de Milán son pareja desde el 2012.
Kjaer fue el primero que corrió en auxilio de su compañero. Cuando el juego se detuvo, el defensor salió disparado a controlar la boca de Eriksen para que no se tragara la lengua y lo colocó en posición de RCP. Una vez que ingresaron los doctores, el capitán hizo que todos los jugadores formen un circulo al rededor del caído para evitar que se tomen imágenes del momento. Mientras todos estaban de espaldas preocupados, él atentamente observaba alerta los protocolos que realizaban sobre el mediocampista.
Durante diez minutos estuvieron con las maniobras de resucitación y por un tiempo, estuvo sin vida. Sin embargo, lograron reanimarlo y trasladarlo a un hospital que se encontraba al lado del estadio. Por fortuna, Eriksen se encuentra fuera de problemas, pero en observación a la espera de más estudios. El partido se suspendió por unas horas, hasta que la UEFA resolvió su reanudación. Finlandia derrotó 1 a 0 a Dinamarca con gol de Joel Pohjanpalo.