En la derrota de Boca 1 a 0 ante Unión, Marcos Rojo debió ser reemplazado tras sufrir una molestia muscular. La sustitución fue por precaución, en los días siguientes mejoró su condición y desde el club optaron por no hacerle estudios. En las ultimas horas, circuló una foto en la que se veía al ex Manchester United en un Centro Médico al que concurrió por su cuenta.
La situación cayó mal en el consejo de fútbol, debido a que se enteraron gracias a un posteo de Instagram. "Agradecemos la confianza del jugador del Club Atlético Boca Juniors, Marcos Rojo, que fue atendido por nuestro equipo médico para la realización de sus estudios", escribió la clínica en su pagina oficial.
Esto fue como un balde de agua fría para la intimidad del Mundo Boca. Al no haber parte oficial, se creía que era una simple molestia, pero al ir el jugador por su cuenta, sin avisar al consejo, explotó la polémica. Muchos apuntaban a que desde el club se quería "ocultar la lesión".
Periodistas allegados y partidarios confirmaron que el malestar se generó por realizarse los estudios en un centro medico sin convenio con Boca. El defensor busca llegar al partido debut de la Copa Libertadores ante The Strongest, pero estaría casi descartado.