Ya finalizando las últimas actividades del 2022, Rosario Central se metió de lleno en lo que será el próximo mercado de pases del fútbol argentino. Luego de una floja campaña, pero donde Carlos Tevez logró que el equipo sume algunos puntos importantes para alejarse del fondo de la tabla, el Canalla buscará reforzarse lo mejor posible con la ilusión de pelear en lo más alto el año entrante.
En este sentido, el Apache se reunió con los dirigentes para comentarles el interés de contratar a, nada más ni nada menos, que Ricardo Centurión, ex compañero de Boca y quién a mediados de septiembre encendió las alarmas con unas contundentes declaraciones sobre el difícil momento que atraviesa personalmente. "Me cansé de la vida", había confesado en dialogo con Radio La Red.
Tras su breve paso por San Lorenzo, el jugador retornó a Vélez, institución con la que tiene contrato hasta diciembre del 2024, y se encuentra entrenando apartado del plantel profesional por decisión del cuerpo técnico. Sin embargo, a pesar del interés del Canalla, las negociaciones entre Tevez y Centurión no llegaron a buen puerto esta vez, más bien, todo lo contrario.
Tevez estaba interesado en sumar a Centurión a Central en el 2024. Incluso, llegó a existir una comunicación telefónica entre ambos, pero después el jugador tomó distancia, no volvió a atender los llamados del director técnico y provocó un fuerte enojo en Rosario.
Según informó el periodista Fernando Carrafiello, los ex Boca habría acordado juntarse en Arroyo Seco para empezar a afinar los detalles y con el objetivo de que Centu ya pueda conocer el club. Sin embargo, el delantero nunca apareció, lo plantó a Tevez y dejó de contestar los mensajes de un momento al otro.
La situación no cayó para nada bien en el cuerpo técnico y el entrenador decidió bajarle el pulgar de inmediato por su actitud.
Cabe recordar que Centurión no juega desde abril del año 2022, ante Patronato, por la fecha 12 de la Copa Liga Profesional con San Lorenzo. El futbolista de 29 años había sido titular en todos los partidos de los primeros meses y hasta llegó a convertir dos tantos.
Sin embargo, por situaciones extradeportivas que no gustaron en el Ciclón, Centurión tuvo que tomar todas sus cosas y retornó a Liniers, dónde no volvió a ser tenido en cuenta por Mauricio Pellegrino ni con el Cacique Medina después.
Las dramáticas reflexiones de Centurión:
"Siempre que me la pegaba iba a entrenar igual. Esto de faltar me agarró de grande, de pelotudo. Hay entrenadores que me dieron la mano y yo les agarré el codo”, había comentado en La Red haciendo una autocrítica. “No puedo mirar a los ojos a mi hija. No me pudo cambiar ni el amor de mi hija. Se que hice muchas cosas mal pero no puedo solucionar las cosas. Yo sigo viviendo en pandemia, sin contacto con nadie. Me cansé de la vida. Estuve con ataques de pánico, desparecido varios días. No me banco ni yo”, agregó también con mucha angustia.
Además, manifestó: "Creo que puedo con todo y no es así, necesito ayuda. Quiero revancha. Tengo 29 años y necesito cambiar, volver al fútbol”, mientras que también reveló: “Nadie me pregunta que me pasa, no me miran a la cara. Mi teléfono no suena. Nadie me llama"