Luego de su paso por la Selección de Perú, Ricardo Gareca siempre es un nombre que aparece en el radar de los equipos más grandes de Argentina cuando los resultados no acompañan. En los últimos meses, especialmente por su buena relación con el vicepresidente Juan Román Riquelme, el Tigre fue mencionado varias veces para ser el nuevo entrenador de Boca cuando el Consejo de Fútbol todavía no tenía decidido renovarle el contrato a Hugo Ibarra.
El ex futbolista del Xeneize, que todavía es mirado de reojo por algunos hinchas por su traspaso a River en 1985, está sin trabajo y, en una entrevista con ESPN este lunes, volvió a referirse a la chance de dirigir en el país y le abrió las puertas al club de La Ribera.
Gareca confesó que Boca nunca lo llamó:
En primero lugar, el exfutbolista aseguró que está dispuesto a volver a trabajar en el fútbol argentino y especialmente en el Xeneize. "Si me llama un club de la Argentina dirigiría. En Boca tuve una historia que el hincha no olvida, pero no son los que deciden más allá de que puedan opinar. Los dirigentes son los que definen y tienen que estar convencidos de contratarme, cosa que no ha ocurrido. Nunca se inclinaron por mí. Soy muy respetuoso de la opinión de los hinchas", comentó.
A su vez, volvió a remarcar que estaría dispuesto a sentarse en el banco de suplentes pese a lo que podría sentir los simpatizantes del club. "No contemplaría los hinchas, la gente es muy pasional, se puede tornar agresiva pero es lo más legítimo que tiene el fútbol. A nosotros viene un club, nos pone más dinero y nos vamos, pero el hincha no traiciona, es fiel, le puede llegar a doler", reconoció.
Por otro lado, reveló que nunca fue contactado por la actual dirigencia, pero sí recibió llamados durante la presidencia de Daniel Angelici. "En un momento me descoló, parecía que había información muy cierta de todo, pero nunca recibí una llamado concreto. La única vez fue con Angelici, pero ya estaba en contrato con la selección peruana, no tenía la manera de salir", detalló.
A su vez, el Tigre también rememoró su etapa como futbolista en la que quedó marcado por haberse formado en La Ribera y, luego de un conflicto contractual, quedar libre para irse al Millonario con Oscar Ruggeri. "El hincha no lo va a entender de ninguna manera, éramos jugadores formados en Boca, pero ese momento del club era irrepetible. Nos tocó vivir dos o tres años muy difíciles. Todo le plantel pidiendo la libertad de acción, ocho meses sin cobrar. Cómo hacés para pensar que eso ocurriría en Boca", explicó.
En la misma línea, el Gareca confesó: "Nunca quisimos ir a River, le dimos a Boca todas las facilidades, aceptamos quedarnos por la mitad pero llegaron todos los cheques para atrás". Asimismo, reveló los duros momentos que le tocó vivir en esa época: "Otras hinchadas nos decían que éramos traidores, incluso hinchas de otros equipos, la pasamos mal. Hoy no pasa nada con los hinchas. Hay de todo, pero nunca me trataron con falta de respeto ni tuve una agresión en la calle"