En los últimos minutos trascendió la noticia de que Fernando Báez Sosa, habría llegado al hospital de Villa Gesell con actividad cardíaca, lo que contradice al acta de defunción, la cual indica que el joven falleció horas antes, en la vereda del boliche Le Brique.
El electrocardiograma, que prueba esta información, está incluido en la historia clínica, que fue omitida en el juicio contra los ocho jóvenes que terminaron condenados en febrero de este año.
El informe, fue incorporado al expediente y es motivo de investigación por parte de la Cámara de Casación Penal, tras la apelación del fallo por parte de los padres de Fernando y de la defensa de los ocho condenados.
Luego de cuatro meses desde la sentencia, la incorporación de la historia clínica en la causa, podría iniciar un nuevo giro en el caso y a nuevas interrogaciones en cuanto a las responsabilidades en relación a la muerte del joven.
La condena a los rugbiers
Luego de considerar culpables a los ocho rugbiers, por el asesinato de Fernando Báez Sosa, el 18 de enero de 2020, El Tribunal Oral en lo Criminal de Dolores condenó a prisión perpetua a Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Enzo Comelli, Matías Benicelli y Luciano Pertossi. En tanto, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi fueron condenados a 15 años de prisión por ser considerados partícipes secundarios.
Según resolvieron los jueces, el ataque se dió luego de una discusión que Thomsen había tenido dentro del boliche con la víctima y dos amigos. Los golpes, que acabaron con la vida de Fernando, ocurrieron minutos después de haber sido retirados del complejo.
La palabra de Burlando
El abogado de la familia de Báez Sosa, Fernando Burlando, explicó esta mañana por qué no se incluyó la historia clínica en el juicio y afirmó que “cuando llegó la doctora al lugar, ya el personal policial había constatado la ausencia de signos vitales” y que Fernando “había fallecido en el lugar”.
En dialogo con Radio 10, el abogado explicó que “todo eso se aclaró durante la audiencia”, además confió en que, no cree que se modifique la pena de los acusados.
“Cuando llega la doctora, ya incluso el personal policial había constatado la ausencia de signos vitales de Fernando. No solamente con las lesiones que habían provocado en el sistema nervioso, que prácticamente estaba sin pulso. Lo que significa que ya había fallecido, asesinado en el lugar”, expresó Burlando.
La historia clínica que se filtro esta mañana, incluye varios electrocardiogramas de Fernando Báez Sosa. El primero, a las 5:55hs y el segundo a las 6:00hs en la clínica. Lo que estaría contradiciendo a la información que se tuvo en cuenta durante el juicio, que adjudicaba el deceso de Fernando Báez Sosa en el lugar, pasadas las 5:05hs.