En el marco de la primera Sesión Ordinaria del 2024, el El Consejo Superior de Programación y Gestión Estratégica de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN), decidió por unanimidad, declarar la emergencia económico financiera, hasta el 31 de diciembre.
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La medida, responde al "notorio desfasaje entre el presupuesto prorrogado y el innegable contexto inflacionario imperante en el país, lo que impacta directamente en el desarrollo de las funciones sustantivas de la Universidad y sus necesidades de financiamiento".
Según informaron oficialmente, la declaración fue votada por unanimidad por las y los integrantes del Consejo Superior de Programación y Gestión Estratégica de la UNRN durante la primera Sesión Ordinaria del órgano colegiado de gobierno de la Universidad, la cual está presidida por el rector de la institución, Anselmo Torres.
En este mismo sentido, subrayaron que el congelamiento del presupuesto en el contexto de inflación acelerada, no solo afecta a la planificación institucional y advirtieron sobre el riesgo que corren las actividades académicas, de extensión y de investigación. Asimismo, alertaron que no pueden garantizar el la continuidad en el pago de locaciones edilicias y servicios públicos para todo el ejercicio.
"Ante este escenario, es necesario programar acciones a corto plazo tendientes a afrontar el grave desequilibrio presupuestario que las medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo Nacional implican", remarcaron en un comunicado oficial.
Por ello, el órgano colegiado resolvió que "los ahorros o incrementos de recursos que resultaren del ejercicio de las facultades delegadas, serán destinados prioritariamente a solventar los gastos básicos de funcionamiento para garantizar el mantenimiento y la calidad de las funciones sustantivas de la institución".
Por otro lado, dictaminaron que "la máxima autoridad unipersonal deberá rendir cuentas periódicamente de los procedimientos aprobados, su aplicación y las metas alcanzadas" y puntualizaron que la declaración de emergencia que se promueve, "no es resultado de una mala administración interna y de la falta de cumplimiento de los fines estatutarios".
La decisión "se plantea como instrumento defensivo ante un escenario que requiere de una rápida respuesta institucional, a fines de no comprometer los logros alcanzados a lo largo de la joven pero próspera historia de esta Universidad", comunicaron.