Una mujer denunció a sus dos hermanas y las acusó de vender donaciones que llegaban a la ciudad norteña para las comunidades originarias Wichis.
Ambas mujeres son funcionarias públicas y están involucradas en la gestión del municipio de Tartagal. La primera es Paola Díaz, concejala de Tartagal e integrante del frente Ahora Patria que conduce el intendente Mario Mimessi (UCR) y la segunda es Rosa Díaz, actual defensora oficial civil del distrito Judicial de Tartagal.
Según la denuncia que publicó el portal de noticias El Destape, la noticia es preocupante, en primer lugar porque la situación de la comunidad originaria es muy delicada y segundo porque es su hermana quien hizo eco de semejante bochorno.
La denunciante se llama Sandra Díaz, hermana de las funcionarias. Según su grave acusación, Paola y Rosa Díaz conseguían las donaciones de ropa y comida gracias al Gobierno y a organizaciones nacionales e internacionales sin fines de lucro para ponerlas en venta en los negocios de Villa Saavedra.
La mujer pidió que la noticia se difundiera en todos los medios y logró ubicar a un periodista que finalmente logró ingresar a la casa y verificar la existencia de un galpón repleto de bolsas y cajas con ropa, zapatillas y alimentos.
La concejala Paola Díaz se justificó diciendo que desde la organización benéfica sabían que las donaciones estaban en esa casa y que por la pandemia, no pudieron entregarlas. "Ellos saben que las cosas están acá y en ningún momento se vendió nada", afirmó Díaz entre lágrimas. Mientras tanto, la denunciante seguía con su postura y decía que sus hermanas se encargaban de vender esas mercaderías y que eran unas "sinvergüenzas".