En ese marco, el nuncio apostólico afirmó que "el Papa Francisco tiene sus enviados y yo soy uno de ellos. La sociedad, la iglesia, la Argentina, las familias y sobre todo Dios necesitan de ustedes por la capacidad y el profesionalismo que muestran", señaló el representante pontificio.
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"No se olviden nunca que Dios nos ha creado para ser felices, no para sufrir. Aprovechen esta vida", subrayó al tiempo que agregó: "para Dios nosotros somos irrepetibles y excepcionales", agregó.
Por otra parte, Julio Alak lo acompañó a recorrer el Centro de Formación Profesional y el Polo Industrial donde trabajan cerca de 400 internos.
Acompañaron al funcionario y al monseñor los subsecretarios de Política Penitenciaria, José González Hueso y de Inclusión Penitenciaria, Diego Rao, el jefe del SPB, Xavier Areses, integrantes de la Plana Mayor y el Capellán General, Carlos Pont Gasques, entre otros.