La inflación en la Ciudad de Buenos Aires trepó al 10,8% en agosto. Acumula una suba de 79,8% en lo que va del año, y 127,3% interanual.
Así lo reveló el Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires, que a la vez puntualizó que entre enero y agosto de este año, la suba de precios llegó al 79,8%.
De esta forma, la inflación de agosto registró un incremento de más de 3 puntos en relación a la de julio, que había sido del 7,3%.
Durante agosto la variación del IPCBA respondió fundamentalmente a las subas en las siguientes divisiones: Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles, Alimentos y bebidas no alcohólicas, Restaurantes y hoteles, Salud y Transporte, que en conjunto explicaron el 69,8% del alza del Nivel General.
Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles aumentó 13,8%, contribuyendo con 2,56 p.p. a la variación mensual del IPCBA, al impactar principalmente los ajustes en los precios de los alquileres y en la tarifa residencial del servicio de suministro de agua.
En menor medida, se destacaron los incrementos en los valores de los gastos comunes por la vivienda.
Alimentos y bebidas no alcohólicas promedió una suba de 12,5%, con una incidencia de 2,22 p.p. en el Nivel General. Al interior de la división, el principal impulso provino de Carnes y derivados (19,2%). Le siguieron en importancia, Pan y cereales (10,4%), Verduras, tubérculos y legumbres (15,9%) y Leche, productos lácteos y huevos (7,7%).
Restaurantes y hoteles registró un incremento de 8,3% e incidió 0,99 p.p., como resultado de las subas en los precios de los alimentos preparados en restaurantes, bares y casas de comida. En sentido contrario, las caídas en las tarifas del servicio de alojamiento en hoteles por motivos turísticos contribuyeron a quitar presión sobre esta división.
Salud aumentó 10,8%, con una incidencia de 0,89 p.p., por ajustes en las cuotas de medicina prepaga y en los valores de los medicamentos.
Transporte promedió una suba de 9,2% e incidió 0,89 p.p., debido principalmente a los incrementos en los precios de los automóviles y de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar.