Vélez atraviesa uno de los momentos más complejos de su historia, tanto futbolístico como e institucional. Hasta el momento, el equipo acumula 13 fechas sin ganar en el torneo local, está cerca de superar su peor racha histórica (que fue de 18 encuentros al hilo sin triunfos) y quedó en el puesto 26 de 28 de la tabla de posiciones, en zona de descenso junto a Banfield. El descontento de la gente ya es notorio hace semanas y la relación entre la dirigencia y el hincha ya está completamente rota.
En este sinuoso contexto, Lucas Pratto -que volvió al club a mediados de 2021 y firmó contrato hasta diciembre de 2023- no se presentó al entrenamiento del domingo y hoy, lunes, se acercó a la Villa Olímpica para retirar sus pertenencias y firmar la rescisión de su contrato. El Oso, uno de los máximos referentes del plantel actual, llegó a un acuerdo mutuo con la dirigencia y le comunicó su decisión a sus compañeros luego del primer entrenamiento de la semana.
Lucas Pratto quedó libre de Vélez:
Pese a haber disputados 202 partidos, con 51 goles y tres títulos, la relación entre el Oso y Vélez se quebró algunas semanas atrás, en especial cuando tuvo un fuerte ida y vuelta con los hinchas que se acercaron al estadio de Quilmes para presenciar el partido frente al Deportivo Español, por Copa Argentina.
“¿Sabés que soy humano, que tengo sentimientos? ¿Vos sabés si yo estoy feliz? Mirá cómo estoy. Estoy muerto hace tres meses, no le ganamos a nadie... ¿Te creés que estoy contento? ¿Qué querés que haga? Yo sé que estoy jugando mal, pero me estoy rompiendo el orto dentro de la cancha”, lanzó angustiado por detrás del alambrado.
Desde la llegada de Marcelo Bravo en lugar de Ricardo Gareca, Pratto perdió la titularidad y sumó pocos minutos viniendo desde el banco de suplentes. Además, la dirigencia ya lo tenía entre ceja y ceja desde hace rato, creyendo que era un "líder negativo" para los más chicos.
Por eso, tras una reunión entre Pratto, su representante Gustavo Goñi y Christian Bassedas, director deportivo de la institución de Liniers, el Oso decidió ponerle punto final a su segundo ciclo en el conjunto de Liniers.
Hinchas de Vélez interrumpieron el entrenamiento para insultar a los jugadores:
Pero esto no es todo porque, tras recibir la noticia de Pratto, decenas de simpatizantes se hicieron presentes en la Villa Olímpica para pedirles explicaciones a los jugadores por el mal presente del equipo.
Mientras se desarrollaba la práctica de fútbol, los hinchas comenzaron a insultar, canta y exigir que el próximo viernes se le gane a Arsenal de Sarandí en el José Amalfitani (duelo clave por la permanencia).
Parte del plantel se acercó al alambrado para dialogar con los fanáticos. “Son pibes de 18 o 20 años, no tienen responsabilidad de nada. Nosotros sin dudas que nos tenemos que hacer responsables. Tenemos que dar mucho más, eso seguro. El compromiso lo tenemos todos, muchachos. Estamos hechos mierda”, dijo Santiago Cáseres, surgido de la cantera velezana y quien se recupera de una lesión.
También dialogaron jugadores de talla como Diego Godín, Lucas Janson, Leonardo Jara y Leonardo Burián. Más tarde apareció el capitán, Lautaro Gianetti, quien estaba realizando trabajos en el gimnasio y entabló una breve charla con otros simpatizantes. También se vio a Christian Bassedas.
