El pasado 19 de abril, Gran Hermano abrió las puertas de su casa para recibir a un nuevo integrante muy especial: Arturo, un galgo mestizo que fue rescatado en la ciudad de Baradero y que llegó a la competencia para traer un poco de estabilidad y unión entre los participantes.
Te puede interesar
Sin embargo, lejos de eso, el perro está conviviendo en un clima muy hostil en medio de muchas peleas y discusiones entre los jugadores. La mascota se vio envuelta en violentas situaciones y por eso la agrupación protectora que lo rescató lanzó un fuerte comunicado pidiendo por su bienestar.
“Queremos manifestar nuestro descontento con los hechos que están sucediendo en la casa de Gran Hermano respecto a Arturo, un perro rescatado del maltrato, que ingresó al programa para que sea su hogar de tránsito”, expresaron desde Huellitas Perdidas a través de su cuenta oficial de Instagram.
Gran Hermano se negó a devolver al perro Arturo:
Desde la asociación señalaron que el objetivo de su colaboración con el programa siempre fue “generar un mensaje de concientización sobre la importancia de involucrarse, rescatar, transitar y dar en adopción”. Sin embargo, esto pasó a un segundo plano luego de observar el entorno en el que convivía el galgo. “Creemos que no fue correcta la decisión, siendo que se sobrepasaron límites, desde que lo que nos respecta, no son sanos para Arturo. Nos equivocamos”, puntualizaron en el posteo.
"Solicitamos inmediatamente a la producción de Gran Hermano Argentina la restitución del perro, poniendo a disposición, por parte de esta agrupación, hogar de tránsito, cuidados necesarios y posterior adopción, supeditada a su correspondiente formulario de adopción”, continúa el comunicado. “Desde ya queríamos informar que el perro siempre estuvo a resguardo de cualquier tipo de acto agresivo y en permanente control por parte de un equipo de profesionales en la materia, aun así, siendo que acontecieron hechos de público conocimiento, ya no es un lugar apto para Arturo, como no lo sería para ningún animal que los padezca”, explicaron.
Pero eso no es todo, porque al día siguiente de haber publicado ese comunicado, desde Huellitas Perdidas revelaron que la producción no dio lugar al reclamo de la asociación. “Lamentamos comunicar que la producción de Gran Hermano no está dispuesta a entregar a Arturo, pese a nuestro requerimiento y puesta a disposición. Nuestra intención fue hacer público el pedido, con respeto y poniendo en palabras lo que sucede y lo que queremos para el perro”.
"Obtuvimos como respuesta un NO!, argumentando que podemos ver a Arturo las 24hs, si! como leen! Al parecer el rating y las puras estrategias de marketing hacen que un ser vivo pase a segundo plano. Ante esta negativa no vemos más remedio que realizar las acciones legales correspondientes", explicaron.
"Nos apena tener que pasar por esta situación, ya que como muchos saben, nuestra tarea está enfocada en otro punto, SEGUIR RESCATANDO!, pero no tenemos otra alternativa, ya que la producción de gran hermano elude nuestra solicitud", cerraron.
En alusión a los hechos violentos mencionados por la institución, lo cierto es que la mascota del certamen convive con mucho nerviosismo y estrés mientras sus dueños protagonizan fuertes peleas a los gritos en la casa. La tensión se apoderó de la competencia, en especial debido al enojo y la ira de Furia en los últimos días.
Ya sea gritándole directamente o a sus compañeros, o bajándolo sin cuidado alguna de las camas, Juliana se convirtió en el centro de atención de las asociaciones que abogan por el bienestar de los animales.