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Woebot, la app que podría reemplazar a los psicólogos en la atención de salud mental, según expertos

En EE.UU., empresas tecnológicas afirman que la IA complementará la falta de servicios de atención psicológica en todo el mundo.

Miércoles, 05 de junio de 2024 a las 18 13

Por Ezequiel Bucetto

Miércoles, 05 de junio de 2024 a las 18:13

En los últimos días, la aplicación Woebot, un bot de asistencia psicológica, generó un gran revuelo en la comunidad de la salud mental. Este bot promete ofrecer una "terapia automatizada", especialmente útil cuando acceder a un terapeuta en persona es complicado o costoso.

Sin embargo, esta tecnología también llevó preocupaciones sobre el impacto en la profesión de los psicólogos. La demanda de atención psicológica sigue en aumento, y muchos se preguntan si estas herramientas digitales pueden sustituir o complementar el trabajo humano.

Durante la pandemia, aproximadamente  el 40% de los adultos en Estados Unidos reportaron síntomas de ansiedad o depresión, según datos de la Fundación Familia Kaiser. Las autoridades de salud señalaron una escasez importante de psicoterapeutas y psiquiatras. La organización Salud Mental en Estados Unidos informó que casi el 60% de los estadounidenses con problemas de salud mental no recibieron tratamiento el año pasado.

Woebot, la app que podría reemplazar a los psicólogos

Alison Darcy, psicóloga y fundadora de Woebot Health, señaló que la pandemia aumentó la demanda de su aplicación, duplicando la cantidad de usuarios diarios a decenas de miles.

Darcy explicó que “si podemos cumplir alguna de las funciones que cumple el humano, entonces podremos extender realmente su uso y así reducir la incidencia del sufrimiento en la población”.

El mercado de la salud mental digital explotó, con más de 10.000 aplicaciones disponibles, según la Asociación Estadounidense de Psiquiatría. Desde la meditación guiada con Headspace hasta la terapia de texto en plataformas como Talkspace y BetterHelp, las opciones son diversas.

Sin embargo, Woebot es de las pocas que utiliza inteligencia artificial para implementar la terapia cognitivo-conductual (TCC), una técnica ampliamente usada para tratar la ansiedad y la depresión.

Woebot emplea procesamiento del lenguaje natural y respuestas preprogramadas para imitar una conversación humana, recordando sesiones pasadas y ofreciendo consejos sobre diversos problemas, como el estrés y los trastornos del sueño.

Jesse Wright, director del Centro de Investigaciones de la Depresión de la Universidad de Louisville, comentó que “es fácilmente adaptable a un entorno digital, donde la gente puede asimilar esos conceptos y poner en práctica los ejercicios que los ayudarán a pensar más racionalmente”.

Las repercusiones de la llegada de la IA a los servicios de salud mental

La implementación de la terapia digital no está exenta de críticas, ya que Hannah Zeavin, autora del libro "La distancia de la cura: una historia de la teleterapia", sostiene que aunque la TCC puede ser efectivamente enseñada por algoritmos, la idea de una terapia automatizada es “una fantasía” que prioriza la accesibilidad sobre la eficacia real.

“Somos animales extremadamente confesionales: le contamos todo hasta a un robot. Pero cuidado: confesarse y recibir atención de salud mental no son equivalentes”, afirmó.

John Torous, director de psiquiatría digital del Centro Médico Beth Israel Deaconess en Boston, también muestra reservas. Señaló que la tecnología aún no está al nivel de la psiquiatría, y “no hay manera de predecir quién responderá al tratamiento y quién no”. Existe el riesgo de que estas aplicaciones puedan retrasar el acceso a tratamientos más efectivos.

Sin embargo Alison Darcy, la creadora de la aplicación y también psicóloga estadounidense, sostiene que Woebot puede formar un vínculo terapéutico y empático con sus usuarios, citando un estudio reciente en el que 36.000 usuarios afirmaron sentir que “Woebot me aprecia”

A pesar de las críticas, Darcy no considera a Woebot como un sustituto de la terapia tradicional, sino como un complemento. “Cada vez que tenés hambre no vas a un restaurante cinco estrellas. A veces con un sándwich alcanza”, comentó Darcy. “Woebot es un sándwich, y de los buenos”.

La empresa busca ahora la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) para utilizar su tecnología en el tratamiento de la depresión posparto y adolescente, con la esperanza de vender su programa a sistemas de salud.

Jóvenes argentinos ganaron un concurso de la NASA y sueñan con llevar su robot a la Luna

Crearon RoverTito, el primer rover lunar de Latinoamérica, y Ainoken, una aplicación que permite medir la actividad sísmica en la Luna.

A fines de 2023 un grupo de siete jóvenes argentinos, oriundos de seis provincias distintas de nuestro país, se consagraron ganadores del hackatón NASA International Space Apps Challenge, una competencia de prestigio mundial.

Su proyecto se basó en la creación de RoberTito, un robot lunar de bajo costo y Ainoken, una aplicación que permite monitorear la actividad sísmica lunar. Ahora sueñan con llevarlo a la luna. 

A través de un mail se enteraron del glorioso triunfo, y supieron que tienen la posibilidad de asistir a la ceremonia de premiación en Estados Unidos el próximo 4 de junio. Mientras recaudan fondos para poder viajar, trabajan en los avances de RoverTitoel primer rover lunar de América Latina

¿Quiénes son los jóvenes argentinos que ganaron un concurso de la NASA?

  • Tomás Liendro: 27 años, es ingeniero mecánico y el líder del equipo. Nacido en Santa Cruz, actualmente vive en Villa Carlos Paz, Córdoba, junto a su pareja -que cumple el rol de mentora-, Sol Maldonado Betanzo.
  • Sol Maldonado Betanzo: 28 años, es ingeniera electrónica, y oriunda de Comodoro Rivadavia, Chubut. 
  • Dolores Avalis: 26 años, es diseñadora industrial, oriunda de Villa Mercedes, San Luis, y erradicada en San Carlos de Bariloche, Río Negro. 
  • Fabián Burgos: 25 años, es ingeniero electrónico y nació en Sunchales, Santa Fe, pero también vive en Bariloche. 
  • Lautaro Mendieta, 28 años, es ingeniero en telecomunicaciones, porteño de nacimiento, se instaló en Viale, Entre Ríos. 
  • Juan Manuel Losarcos: 27años, es geólogo, oriundo de Santa Rosa, La Pampa, y está cursando su doctorado en Geología Planetaria en Illinois, Chicago. 
  • Santiago Núñez: Es ingeniero electrónico y analista programador universitario, comoderense y residente de su ciudad.

El camino al éxito

El equipo de argentinos se formó hace dos años y ya en 2020 había ganado el OpenSpace con el diseño de RoverTito. Su clave de éxito fue la colaboración y el respeto mutuo entre los miembros del equipo, a pesar de las distancias geográficas. 

Tras ese éxito, en la edición 2023 volvieron a presentarse, y lograron consagrarse como uno de los 10 equipos ganadores entre 57.000 personas y 8715 equipos de todo el mundo. Esta vez participaron 5.556 proyectos, todos enfocados en crear soluciones innovadoras.

Según contaron los ganadores todos los integrantes del grupo comparten una fascinación por el espacio que nació desde la infancia.

El hackatón de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) les brindó la oportunidad de demostrar su talento y potencial.

Los detalles del proyecto

RoverTito es un robot lunar que pesa 2kg y tiene seis motores y diversas cámaras que buscan identificar el entorno lunar. Su objetivo es ser un primer paso hacia la exploración espacial colaborativa.

Ainoken, en tanto, es un mapa interactivo de terremotos lunares (moonquakesa través de una aplicación web que permite monitorear la actividad sísmica en superficie lunar, basada en datos de sismógrafos de la NASA. Es decir, es una aplicación web que permite visualizar y analizar datos sobre terremotos lunares. 

Hoy tienen un nombre propio, que eligieron para identificarse en la competencia: Spacebee Technologies. La traducción literal serían las palabras “espacio y abeja”, y de ahí se desencadena un concepto que representa la misión que tienen en mente.

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