Tras las trabas del bloque de Juntos por el Cambio para que no sesione el Congreso, el Frente de Todos buscará presionar a la oposición para avanzar con el proyecto que plantea una moratoria previsional para permitir que 800 mil personas se puedan jubilar. El oficialismo convocó a una audiencia pública en la Cámara de Diputados.
La audiencia pública fue fijada para el próximo miércoles a las 14 en la sala del anexo C, donde fueron llamados a participar adultos mayores y sindicatos.
"Escucharemos las voces de adultos mayores sobre la importancia y necesidad de que esta herramienta sea discutida y aprobada en la Cámara de Diputados; y de representantes de los trabajadoras sindicalizados que vienen reclamando la sanción de una ley que permitirá garantizar el acceso a la jubilación a miles de personas en todo el país", precisaron fuentes del oficialismo a la agencia NA.
Además, estará presente la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta, y diputados de diferentes provincias del país para acompañar la medida. El proyecto que podría beneficiar a 800 mil personas fue aprobado en el Senado, pero sobre fin de 2022 quedó trabado en Diputados por la falta de predisposición de Juntos por el Cambio.
El tema está incluido en el temario de sesiones extraordinarias que envió el Poder Ejecutivo, pero todavía no hubo consenso para avanzar en su tratamiento. Juntos por el Cambio advirtió que no participará de ningún debate legislativo mientras siga en discusión el pedido de juicio político contra los integrantes de la Corte Suprema de Justicia que tiene en su poder la Cámara de Diputados.
En qué consiste la moratoria
El nuevo Plan permite la regularización de los períodos faltantes de aportes hasta diciembre de 2008 que, según estimaciones de la ANSeS, permitiría incluir en el sistema alrededor de 800.000 personas en edad jubilatoria en los próximos dos años, de las cuales el 60% son mujeres.
El proyecto tiene media sanción del Senado desde el 30 de junio, pero no fue tratado en Diputados por falta de quórum.
Hasta tanto no se sancione el Plan de Pago, las mujeres deben esperar hasta los 65 años para acceder a la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), que equivale al 80% del salario mínimo, unos $40.000. Por su parte, los varones de 65 años o más también pueden tramitar la PUAM, que no toma en cuenta los años aportados y tampoco permite recibir una pensión por muerte del cónyuge.
En tanto, sigue vigente la moratoria creada por la Ley 24.476, que contempla que los períodos de trabajo a regularizar deben estar comprendidos entre enero de 1955 y septiembre de 1993.
De aprobarse en extraordinarias, el Plan de Pago de Deuda Previsional regiría por dos años y permitiría saldar la deuda de aportes en hasta 120 cuotas, que se descontarían de manera directa del haber jubilatorio que le corresponda. También permitiría a quienes estén a menos de diez años de cumplir la edad jubilatoria y saben que no alcanzarán los 30 años de aportes, ir adelantando el pago.
La estrategia del Frente de Todos
En este contexto de cepo al Congreso, en el que mucho tiene que ver la ofensiva oficialista contra la Corte Suprema de Justicia a través de la movilización de los pedidos de juicio político contra sus integrantes en la comisión homónima, el Frente de Todos no tira la toalla y piensa en una sesión con temario corto para la semana que viene, con temas no tan ríspidos que permitan llegar a consensos con otros sectores de la oposición.
Mientras Juntos por el Cambio se atrinchera en contra de cualquier atisbo de sesionar en la medida en que el oficialismo sostenga el procedimiento de juicio político contra la Corte, la mira está puesta en el interbloque Federal, la fuerza política que tiene la llave para sesionar ya que sumando sus legisladores a la tropa oficialista se llegaría fácilmente a los 129 diputados necesarios para el quórum.
El interbloque Federal está de acuerdo con la moratoria previsional y eso es un buen signo para el oficialismo, pero el panorama es incierto porque en la bancada presidida por Alejandro "Topo" Rodríguez hay quienes pretenden que el Frente de Todos se ponga primero de acuerdo con Juntos por el Cambio para evitar un nuevo escándalo como los que ocurrieron en diciembre pasado, cuando la polarización se llevó puesta dos sesiones.