Las protestas en Francia tras la aprobación de la reforma jubilatoria por parte del presidente Emmanuel Macron aún no cesan. Tras un nuevo intento de derogarla, a casi tres meses de su aprobación, la gente salió a las calles para pedir su anulación.
Los sindicatos convocaron una jornada de protesta y manifestaciones para este martes, dos días antes de una votación en la Asamblea Nacional para derogar la ley impulsada por decreto.
En referencia a la convocatoria, se espera una movilización de entre 400.000 y 600.000 participantes repartidos en 250 puntos distintos, lo que generará el despliegue de 11.000 policías y gendarmes.
La participación parece lejos de los 1,28 millones de manifestantes del 7 de marzo (3,5 millones, según la CGT). El impacto de la huelga, en el sector eléctrico y los transportes, también se anuncia menor.
Aunque las marchas siguen, los sindicatos anunciaron que podría ser una de las últimas maniobras para frenar la disposición del gobierno francés.
Ante este escenario de protestas, el fin de semana pasado, trabajadores de Disney tomaron el Castillo de la Bella Durmiente para exigir mejores condiciones laborales.
El líder del sindicato CFDT, Laurent Berger, señaló en declaraciones a la emisora Europe 1 que "no se trata de un último cartucho", pero podría ser "una de las últimas jornadas de movilización".
El oficialismo, que ya apeló a mecanismos constitucionales para imponer esta reforma, podría el jueves usar uno nuevo para declarar inadmisible un punto clave de la propuesta de derogación presentada por el grupo parlamentario centrista LIOT.
En ese sentido, la secretaria general del sindicato CGT, Sophie Binet, advirtió que esto sería "un escándalo democrático". Para LIOT y la oposición de izquierda, esto recrudecería "la ira y la violencia", sostuvo la sindicalista, citada por la agencia de noticias AFP.
De qué trata la reforma jubilatoria
En abril de este año, el Consejo Constitucional francés validó el retraso de la edad de jubilación de 62 a 64 años para 2030 y el adelanto a 2027 de la exigencia de cotizar 43 años, y no 42, para cobrar una pensión completa. Tras la aprobación del Consejo, el presidente francés promulgó por decreto la reforma jubilatoria.
"Decidimos promulgar la Ley a menos de 24 horas de la decisión del Consejo Constitucional como es el caso para todas las leyes económicas y la misma entrará en vigor en septiembre próximo. Le pedimos a los franceses que hagan un esfuerzo y acepten esta reforma", había anunciado al diario Le Parisien el ministro de Trabajo, Olivier Dussopt.
Luego de esa medida impulsada por Macron, los sindicatos salieron a manifestarse en contra y alertaron que Francia vive una "crisis democrática".