La cantante chilena Ana Tijoux regresa a la Argentina para presentar su último y más reciente disco, "Vida".
El show será el viernes 21 de febrero en el CC Konex.
Las entradas anticipadas ya se pueden adquirir en la web del Konex en este enlace.
Tras un receso de una década desde Vengo, Ana Tijoux, figura clave del hip-hop latinoamericano, regresa con Vida, su quinto álbum en solitario. Este LP de 15 canciones surge de un periodo de experiencias personales intensas para la rapera chilena, especialmente marcadas por la fuerza de la pérdida y la maternidad. Como ella misma explica, "Vida es una respuesta a mucha gente que se me falleció, lamentablemente, gente muy cercana. También es una respuesta a lo que sucedió con esas partidas." Este disco es una declaración profunda sobre la existencia y una celebración de los altibajos de la vida.
El álbum refleja esa introspección a través de temas como “Millonaria”, donde Tijoux yuxtapone la riqueza metafórica de las relaciones personales con la riqueza material; los afrobeats de “Bailando sola aquí”, que tratan sobre la importancia de volver al centro de uno mismo; o “Busco mi nombre”, que aborda la identidad, la memoria y la resiliencia. En este último, los versos como “Rompieron la puerta sin aviso, te arrancaron de mí sin permiso” insinúan un dolor personal y colectivo por aquellos que se fueron injustamente.
La maternidad sigue siendo una influencia central en la vida y arte de Tijoux. Durante los años que pasaron entre Vengo y Vida, la maternidad modificó su visión del mundo, infundiendo en su música una comprensión más profunda de las complejidades de la vida. Esta evolución es evidente en su enfoque hacia su oficio, aprendiendo a navegar por los paisajes emocionales con un renovado sentido de gratitud y autocompasión.
Desde sus inicios en Makiza en los años 90 hasta su éxito en solitario con temas como “1977”, Tijoux siempre forjó su propio camino. "Yo creo que lo más bonito es que no existen pioneras acá, existe un tejido vigente y nos construimos juntos," afirma, subrayando la importancia de la comunidad en el hip-hop. "No es falsa humildad, el mundo del hip-hop y del rap es comunidad. Ahí está su fortaleza y su construcción en su eje, y eso hace toda la belleza de este género."
Sobre la visión del reconocimiento internacional, en particular los elogios que recibió, como los de Thom Yorke, Tijoux reflexiona: "Igual para corregirte, yo no puedo negar que empecé a hacer música en Chile y quien me ayudó fue pura gente chilena. Una cosa son los medios de comunicación… los elogios siempre se agradecen." En este sentido, también agrega que el mundo de la música es un constante tira y afloja entre el ego y la vulnerabilidad: "Es como que en este rubro entendemos que somos todos seres humanos creativos, siempre coqueteando con lo vulnerable y con el ego."
La conversación también se dirige a Radiohead y su éxito a pesar de lo experimental de su música. Para Tijoux, la conexión con su público tiene que ver con la capacidad de transmitir emociones profundas: "Conectan mucho con un público con esa tristeza y pena. A pesar de que estemos en la época de las redes sociales donde todos nos mostramos como grandes elocuentes, esa tristeza atraviesa al ser humano."
En cuanto a su participación en la serie Breaking Bad con la canción "1977", Tijoux cuenta que, aunque en ese momento no tuvo el tiempo de procesarlo por las circunstancias personales, después se dio cuenta de lo impactante que fue: "La vi mucho tiempo después y dije, es increíble, es buenísima. Me encanta el antihéroe. Esta cultura blanca en Estados Unidos, de una casa lo menos cool posible, el lado B gringo. Conecté un montón." También señala cómo su música se acopló a la trama sin ser el enfoque principal: "Hubiera conectado estando o no mi música."
Sobre el largo tiempo entre Vengo y Vida, Tijoux explica que su vida personal y profesional no le permitió sentarse a componer: "Me demoré nueve años porque no paré de girar, no paré de trabajar, y también de criar: tengo dos hijos." Reconoce que este tiempo le permitió procesar todo lo vivido, pero también generó un sentimiento de inseguridad durante la creación del nuevo álbum: "Creo que hay un vértigo natural ante cualquier disco que uno haga. Me atrevería a decir que ningún artista está totalmente seguro de la obra que haga. Siempre hay un margen de inseguridad que es parte de la gracia de todo esto, creo." Para ella, la creación siempre implica un margen de incertidumbre, como explica: "Si una quiere romper ese cerco, siempre hay un margen de incertidumbre. Es parte del crear." Y aunque hay un "peso de las expectativas personales", se siente satisfecha con el resultado: "Lo más bonito es cuando una empieza a despojarse de ese miedo o a desnudarse, y asumir que cualquier cosa que uno haga puede tener una buena o mala recepción."
Por último, sobre el tono de su nuevo álbum, Tijoux lo describe con entusiasmo: "El disco para mí es muy bailable, muy alegre. Me da ganas de bailar."
