La situación con los incendios masivos en la provincia de Córdoba es realmente dramática. Pese al trabajo desesperado de los bomberos y voluntarios, las llamas siguen avanzando inexorablemente en grandes porciones de campo y monte, afectando a casi 16 mil hectáreas.
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En este marco, el bailarín Jorgito Moliniers y su pareja, Hugo Ávila, conocido por haber sido jefe de coaches en el Bailando por un Sueño (El Trece), se sumaron a la lista de víctimas que debieron huir de sus hogares para no ser atrapados por el fuego.
A través de las redes sociales, el artista compartió imágenes devastadoras de cómo quedó su casa totalmente destruida. “Nuestra casita. Cuando nuestra realidad supera ampliamente cualquier ficción”, escribió conmovido en una historia de Instagram.
Muy angustiado, Moliniers contó que perdieron todo. “Lastimosamente, se quemó todo. Habíamos terminado de pagar la casa hacía dos semanas y ahora solo quedan cenizas. No tuvimos tiempo de sacar nada; el viento cambió el rumbo del fuego y Hugo tuvo que huir con los perritos”, contó entre lágrimas, en una entrevista con Pronto.
Y agregó: “Por ahora, una vecina nos prestó su cabaña. No sabemos qué vamos a hacer, estamos pensando, pese al shock que tenemos”.
"Se nos quemó nuestra casita en Capilla del Monte por los incendios... no quedó nada. Mucha tristeza, mucho esfuerzo... pero a ponerle el pecho, como siempre!", escribió por su parte Ávila.
En una de las imágenes compartidas, Moliniers mostró la visión que tenía desde el auto, donde se refugió con su perro. Impactados por la situación, ambos se quedaron mirando los restos humeantes de su propiedad en el Valle de Punilla.
A pesar de la tragedia, el bailarín no dejó que cayeran los brazos y mostró esperanza por salir adelante y agradecimiento por el apoyo recibido: “Seguro hay una enseñanza detrás de todo esto. Juntaremos todas las fuerzas para empezar de cero. Gracias a todos por los mensajes de ayuda y apoyo”.
El llanto de Mercedes Ninci por los incendios en Córdoba.
La periodista conversó con el noticiero de TN y se quebró en vivo al ver las imágenes de la casa de su infancia ubicada en Dolores de Punilla al borde las llamas. "Estoy muy mal, estaba viendo las imágenes y la casa rosa que mostraban recién, la que está frente a la plaza es nuestra. Es tremendo", expresó completamente devastada.
"Esa casa se llama Flor de Durazno, es una casa mítica. Los mejores momentos de mi vida los pasé allí. Mi tío abuelo escribió en esa casa la novela que lleva ese nombre, y después Gardel filmó su primera película, Flor de durazno, en 1917", recordó.
Además, se mostró muy movilizada ya que comentó que estuvo allí el fin de semana. “El domingo, estuvimos en la fiesta patronal y todos le rezamos a la Virgen de Dolores para que llueva", precisó.
Y se lamentó: "Una casa la podés arreglar, pero la naturaleza no tiene reparación. No hay nada que ame más que el monte y desgraciadamente, el monte no se puede recuperar. Tenemos que tener la provincia preparada porque cada vez está más seca. Gastemos la plata en lo importante".