El presidente Alberto Fernández fue trasladado sobre el final de la jornada del martes al Sanatorio Otamendi, por un dolor lumbar agudo. Por lo que la Unidad Médica Presidencial, informó que se le realizarían los estudios correspondientes con el fin de otorgarle un tratamiento médico adecuado.
Finalmente, luego de los estudios, se le detectó una hernia de disco lumbar, y desde la Unidad Médica informaron que se le realizará un bloqueo radicular programada en 48/72 horas. En el comunicado se le aconsejó reposo y realizar sus actividades desde Olivos.
"Al señor Presidente de la Nación, Doctor Alberto Ángel Fernández, le realizaron los estudios correspondientes, evidenciándose una hernia de disco lumbar, por tal motivo se realizará un bloqueo radicular programada en 48 / 72 horas. Se le indica reposo y adecuar sus actividades en la Residencia Presidencial de Olivos", rezó el último comunicado.
El traslado al Sanatorio Otamendi y el primer parte
El presidente Fernández ingresó en horas de la noche al nosocomio por un fuerte dolor de espalda. En el primer comunicado, el equipo médico dio a conocer que presentaba "un cuadro de dolor lumbar agudo".
Por ese motivo, "se le realizarán todos los estudios correspondientes con el fin de poder administrarle un tratamiento específico", aclaraba el texto que lleva la firma del doctor Federico Saavedra, médico personal de Fernández desde hace al menos una década y profesional a cargo de la Unidad Médica Presidencial.
El jefe de Estado había concurrido al mismo establecimiento en noviembre pasado, luego de cancelar su discurso ante el G-20 en Bali, Indonesia, por una descompensación causada por un sangrado digestivo que le provocó gastritis erosiva. En esa momento, Fernández se realizó una endoscopia, cuyo resultado no halló lesiones con sangrado activo.
Este martes, el presidente llevó adelante su agenda oficial con normalidad. Entre sus actividades, estuvo la designación de la abogada Verónica Gómez al frente de la Oficina Anticorrupción.
La flamante funcionaria nacional se recibió con diploma de honor en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires en 1996.
