Según informaron fuentes policiales, una persona, registrada en el teléfono de Jonathan Morel con el nombre de “Dali Revolución”, envió un mensaje al líder de la agrupación Revolución Federal diciendo “contá conmigo. Tengo unas ganas de usar mi 9 mm”. El texto, fue enviado seis días antes del intento de asesinato a la vicepresidenta Cristina Kirchner.
En sintonía con esto, días atrás, la vicepresidenta se refirió a la nueva declaración realizada por la ex asesora de Gerardo Milman sobre los datos borrados adrede de su teléfono y denunció un "encubrimiento" de la noticia por el atentado contra su vida, donde culpó a Patricia Bullrich por una "operación" para borrar datos de un celular vinculado a su intento de magnicidio. Al parecer, los hechos estarían vinculados.
El fiscal federal, Gerardo Pollicita, solicitó la investigación de la supuesta militante de la organización de ultraderecha, Revolución Federal, que el 27 de agosto, se puso a disposición de lo que definió como “la actividad bala”.
En el teléfono de Jonathan Morel, se lee: “Yo no estoy en el grupo pero contá conmigo la actividad bala tengo unas ganas de usar mi 9 mm”. El mensaje, fue enviado por uno de sus contactos, agendado como “Dali Revolución”.
Según trascendió, el fiscal federal, solicitó la inmediata identificación del remitente y posteriormente se consulte con la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC), “si la misma se encuentra registrada como Legítimo Usuario de Armas de Fuego y si cuenta con armamentos identificados a su nombre”.
En este marco, Gerardo Pollicita, pidió que se entrecrucen las comunicaciones realizadas por “Dali Revolución” que puedan relacionarse con las líneas utilizadas por los imputados del expediente.
Los investigadores de la causa, lograron detectar la línea telefónica, la compañía prestadora del servicio y una identidad de la usuaria, aunque esa persona, no aparece en las redes sociales, ni en las bases de datos personales, ni en sitios de búsqueda.
En tanto, el líder de Revolución Federal, Jonathan Morel, está procesado por "incitación a la violencia colectiva" junto a otros tres militantes de la organización.
A pesar de los reiterados pedidos de la querella, sumado a lo solicitado por el juez Martínez de Giorgi, quien sostuvo las investigaciones estaban conectadas, este expediente, sigue su trámite de manera diferenciada a la causa que investiga el atentado a Cristina Kirchner.
La secretaria de Gerardo Milman que declaró el año pasado que había borrado el contenido de su celular para proteger su intimidad, se presentó sorpresivamente el viernes en Comodoro Py y pidió dar testimonio por tercera vez en la causa sobre el intento de asesinato de Cristina Fernández de Kirchner. Allí reveló, entre otras cosas --según pudo reconstruir Página/12-- que en realidad no había vaciado el teléfono por voluntad propia sino que la llevaron a las oficinas de Patricia Bullrich, donde un perito se dedicó durante cuatro horas a eliminar todo lo que había en su aparato, el de otra asesora y el del diputado de Juntos por el Cambio, que todavía era jefe de campaña de la precandidata presidencial. Ese mismo día, horas antes, CFK había anunciado que recusaría a la jueza a cargo de investigar el atentado, María Eugenia Capuchetti, y ponía el foco en la falta de avances en la "pista Milman", uno de los posibles caminos para rastrear si hubo algún autor/a intelectual del disparo que de milagro falló.
Los mensajes de "Dali Revolución" que recibió Morel
El contacto del teléfono de Jonathan Morel, registrado como “Dali Revolución”, aparece en tres grupos distintos de WhatsApp, el primero llamado “Zona Norte Activismo”, otro identificado con el nombre de la agrupación, y el último “Alerta Revolución Federal”.
El 22 de julio, en el grupo “Revolución Federal”, “Dali” comentó “lo único que falta es que la convirtamos en mártir a esta hija de remil putas” en relación a un video que otro miembro del grupo compartió sobre manifestantes que amenazaban a Cristina Kirchner.
Ese mismo día envió otro mensaje: “Lo que fue agresivo fue el mensaje de amenaza de muerte” escribió y agregó “que no es una mala idea tengo una 9 mm cualquier cosa me avisan”.
Días más tarde, el 25 de julio, “Dali Revolución”, insistió en su tenencia del arma. “Tengo una 9 mm y el mástil de la bandera (el consolador de la Cerruti) y tengo gas pimienta” compartió en el grupo.
Ese mismo 25 de julio, Morel habló sobre cómo imaginaba meterse en la multitud y compartió un video donde se ve a Cristina entre la gente, con el comentario “hay que matarla”, a lo que la usuaria en cuestión le respondió, “una granada ahí (...) mi límite es la 9 mm que tengo”.
El día 27 de agosto, “Dali” le escribió a Jonathan Morel, solicitando la letra de una canción que decía en una parte “con Cristina yo me meto y la persigo. Cristina presa el pueblo Unido”. En esa charla, la mujer le propone “yo no estoy en el grupo pero contá conmigo, la actividad bala tengo unas ganas de usar mil 9 mm”.