El presidente Alberto Fernández, habló esta tarde por teleconferencia en la inauguración de la Pastoral Social de la Ciudad de Buenos Aires. Allí tocó diversos temas, pero se centró en la pobreza y las acciones del Estado para combatirla, luego que el Indec diera a conocer las cifras que superaron el 40%.
El jefe de Estado, manifestó que "La pandemia nos somete a desafíos que no esperábamos. Si alguien me preguntaba a mí si cuando pensé en ser presidente escribía los 1.000 problemas que debía enfrentar, estoy seguro de que no escribía la pandemia como un problema. Fue algo inesperado que nos sometió a un nivel de exigencias que nadie, ninguna generación previa a la nuestra, ha tenido que vivir”
Y luego añadió, "Es la lucha por el cuidado del otro, por la supervivencia, por la protección del que peor está. Cuando asumimos el gobierno la situación era de una dificultad enorme. Era una Argentina económicamente decadente. Una Argentina endeudada, con poca perspectiva a futuro. Aun así, con todo lo negativo que la pandemia conlleva, es una oportunidad. Nos permitió dejar al descubierto la debilidad del sistema económico del mundo. Un virus puede arrastrar a la economía del mundo como la arrastró”.
"Hoy en Argentina supimos que 4 de cada 10 argentinos son pobres; y en eso tuvo mucho que ver la pandemia. Los resultados de la pobreza serían infinitamente más negativos si el Estado no hubiera auxiliado”, afirmó el mandario,
"Nosotros hemos desplegado un montón de instrumentos para llegar a los más vulnerables, por eso asumimos con una consigna del papa Francisco: primero los últimos. Y esa lucha que empezamos el 10 de diciembre para tratar de que estén primeros los más postergados, definitivamente se vio complicada con la pandemia. Uno no lo advierte pero yo siempre marco un dato para que nos demos cuenta de la dimensión de la crisis: cuando pusimos el IFE en funcionamiento lo hicimos pensando que el IFE iba a alcanzar a 600 mil monotributistas y a dos millones que el Estado no tenía registrados. Y el número creció hasta descubrir que nueve millones de argentinos no estaban registrados. De uno de cada cuatro argentinos el Estado no sabía de su existencia”, analizó Fernández.
"La pandemia demostró que esa lógica del individualismo no nos hace funcionar bien como sociedad. Esa idea de que nadie se salva solo nunca quedó tan expuesta, la certeza de esa afirmación, como con la pandemia. Los más postergados han padecido mucho más la pandemia", finalizó el mandatario.