El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, brindó su alocución ante la 78º edición de la Asamblea General de la ONU que se celebra en Nueva York. En este hizo alusión a las consecuencias catastróficas que atraviesa su continente, provocadas por el pasado colonial y las nuevas formas de explotación imperantes.
"Siglos después del fin de la trata de esclavos, décadas después del fin de la explotación colonial de los recursos de África, los pueblos de nuestro continente están soportando una vez más el costo de la industrialización y el desarrollo de las naciones ricas del mundo", denunció el mandatario.
"La riqueza de África pertenece a los africanos, la riqueza mineral que se encuentra bajo el suelo de África debe, al final, llegar a los africanos", agregó Ramaphosa.
Además, el líder africano rechazó el gasto que algunas naciones realizan para perpetuar los conflictos armados. “Es una grave crítica a esta comunidad internacional que podamos gastar tanto dinero en la guerra; de hecho, se gastan billones en la guerra, pero no podemos apoyar las medidas que deben tomarse para satisfacer las necesidades más básicas de miles de millones de personas en el mundo, como el hambre, la salud, el empoderamiento de las mujeres y la garantía del desarrollo en los países que son vulnerables”.
Ramaphosa cerró su discurso con un llamado a los países más ricos a "cumplir los compromisos financieros que han asumido", y añadió que "es una gran preocupación que estos no hayan cumplido sus compromisos de movilizar 100 mil millones de dólares al año para que las economías en desarrollo adopten medidas climáticas".