La nueva película de Studio Ghibli, "El niño y la garza", es todo un suceso en los cines de Argentina y en Latinoamérica pero hay una historia particular sobre una mujer que aseguró trabajar para el estudio y revolucionó las redes.
Se trata de Geraldine Fernández, una colombiana que afirmaba haber formado parte del equipo del film y que trabajo codo a codo junto a Hayao Miyazaki, el maestro de la animación y creador de Studio Ghibli.
"Jamás en la vida, a mis 30 años, pensé que iba a terminar trabajando para estudio Ghibli realizando la producción y no solo estando en la película más reciente, sino en la película del retiro de Hayao Miyazaki, es algo difícil de creer" declaró la colombiana en un video luego de que la producción haya sido nominada al Globo de Oro a Mejor película animada, premio el cual luego terminaría ganando el largometraje japonés.
Una de las incongruencias de las declaraciones de Geraldine era la de que dibujó 25.000 fotogramas que luego aparecerían en la película, un aproximado de casi media hora. Según ella, fueron los primeros 30 minutos, escena donde particularmente la animación tiene uno de los momentos más difíciles para animar.
La mentira de la colombiana escaló a tal punto, que llegó a dar una charla en la Universidad Sergio Arboleda de Barranquilla. "La carta (del estudio japonés) decía que ‘por agradecimiento y por todas las cosas que hiciste, por la trasnochada, por tu trabajo arduo’. Después de ilustrar casi 50.000, 20.000 fotogramas, la mano te queda así y pues claramente ellos allá lo aprecian demasiado" aseguró en aquel lugar.
También aseguraba que fue invitada a Japón para hacer un máster en ilustración en la universidad de Tokio y que Hayao la llamaba "la colombianita" durante las intensas jornadas de ilustración de forma remota.
Pronto florecieron aún más las sospechas de los dichos de Geraldine ya que ilustradores de distintas partes del mundo comenzaron a investigar sobre ella y no encontraban el nombre "Geraldine Fernández" en los créditos del film, tampoco en otros sitios que suelen tener una base de datos completa con los integrantes del cast.
Tras haber sido expuesta por ilustradores de todo el continente, la mujer oriunda de Barranquilla, reafirmó su postura diciendo que no puede demostrar que trabajó para la película por las cláusulas del contrato que firmó.
El hecho llegó a los medios de Japón, donde se mostraron indignados por la actitud de la colombiana y por los medios que levantaron dicha información sin corroborar los hechos. "La historia de la ilustradora que afirmaba haber desempeñado un papel importante en la producción de las películas de Ghibli era falsa. Este tema está causando revuelo en Colombia, Sudamérica. Los medios de comunicación que publicaron ampliamente la entrevista sin ningún fundamento se vieron obligados a disculparse" detalló el medio Asahi Shimbun.
Finalmente Geraldine tuvo que salir a aclarar que todo fue mentira: "Nunca existió participación en la película ‘El Niño y la Garza’. Todo lo sucedido fue producto de un mal ejercicio que reconozco y de lo cual estoy arrepentida. Reconozco ante la opinión pública y los medios que la situación se me salió de las manos y para mí fue muy difícil retractarme en esos momentos".
Por último se confirmó que el curso que tomó en Japón era uno de cerámica.
