A pocos meses de volver a presentarse en el mítico Luna Park en Buenos Aires, Fabiana Cantilo hizo un repaso sobre su vida, la cual siempre estuvo marcada por la música y el arte. Sin embargo, entre sus declaraciones, la cantante reveló la difícil situación económica que atraviesa en la actualidad.
En una entrevista con Infobae, la interprete de hits como Nada es para siempre y Fue Amor contó que hoy canta para sobrevivir y llevar el día a día. "Está bueno porque sino no cantaría, estaría tirada abajo de una palmera y me chupa un huevo todo", expresó.
"Me gasté todo mi dinero. Tengo para vivir al día, sí. Tengo que hacer por lo menos dos shows por mes para pagar el alquiler porque no tengo casa propia", narró la artista de 65 años.
La revelación de Fabiana Cantilo sobre su dinero:
Al contar los motivos sobre cómo llegó a esta situación luego de protagonizar tantos éxitos musicales y giras internacionales, Cantilo confesó: "Yo me digo: “Jodete por drogadicta”. Por serlo antes. Hace 11 años que no consumo. Me digo: “Jodete por no hacer las cosas bien”. No me quejo, pero es así"
En ese sentido, agregó: "Hacer todos esos despelotes, quedarte sin dormir, suspender shows, hace que los productores digan: “A esta no la voy a contratar”. Entonces, no tenía como Lali, como Fito que son gente ordenada, que les va bien y tienen la plata que se merecen porque laburan, porque son workaholic, además. Yo no. Yo soy lady vaga"
Haciendo un repaso sobre su vida privada, Cantilo también habló sobre los amores que conoció. Sin embargo, al momento de mencionar qué tipo de hombres elegía, fue contundente: "Obviamente, los malos. Los maltratadores, los mujeriegos. Bueno, no todos porque Fito Páez y Nahuel Lerena que me duraron como cinco años, me padecieron a mí. Todos me amaron con locura", soltó Fabiana.
Y agregó: "Yo fui muy celosa, controladora, pero además yo hacía lo que quería. Una hija de puta. Después yo me buscaba el espejo, el mismo que yo, que me dejaba a mí. Y yo tenía ego y pensaba que por mi sola presencia se iba a enamorar de vuelta y no, ya fue. Porque siempre había alguno que no me daba bola, porque me los elegía, entonces yo estaba sufriendo siempre atrás de algún pelotudo que no me daba bola. No quería sexo. Yo quería bailar, quería divertirme, no quería deprimirme. Entonces, cada 15 días dejaba de salir y a los 15 días vamos de nuevo. Y así, toda mi vida".