La Policía de la Ciudad entró a la fuerza al Colegio Nacional de Buenos Aires, a pesar de que una ley lo impide, e intentó recaudar información sobre la toma de colegios y las personas que se encontraba en el lugar.
La Ley de Educación Superior N°24.521 promulgada y sancionada en el año 1995 establece una serie de derechos y obligaciones sobre los establecimientos educativos universitarios y no universitarios, entre los que se especifica que las fuerzas de seguridad no pueden entrar a establecimientos educativos.
El Artículo N°31 de dicha reglamentación deja en claro que la policía no puede ingresar a las universidades nacionales sin una orden de un juez: “La fuerza pública no puede ingresar en las instituciones universitarias nacionales si no media orden escrita previa y fundada por un juez competente o solicitud expresa de la autoridad universitaria legítimamente constituida”.
En ese contexto, la policía de Horacio Rodríguez Larreta entró a la institución violando la ley e intentó interrogar a los trabajadores y estudiantes del lugar para recopilar datos sobre las medidas de fuerza que se desarrolla en algunos colegios públicos de CABA.
Sin embargo, uno de los presentes tenía pleno conocimiento de sus derechos y captó el momento con su teléfono celular: en el video le explica a la mujer policía que no puede estar parada dentro del colegio y que su compañero -que no aparece en las imágenes- no puede dar ningún tipo de órden.
Larreta amenazó a los padres de los estudiantes: "Los que apoyen medidas violentas van a tener que hacerse cargo"
En conferencia de prensa, Horacio Rodríguez Larreta habló por primera vez de las tomas en los colegios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El jefe de Gobierno porteño prometió ser "inflexible" con aquellos que continúen ocupando los establecimientos educativos y cargó contra los padres de los y las jóvenes que reclaman por mejoras edilicias, mejoras en las viandas y en las prácticas laborales.
“Los padres que apoyan medidas violentas van a tener que hacerse cargo del daño que sus hijos están provocando”, lanzó amenazante el alcalde de la Ciudad en compañía de la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña y otros miembros de su gabinete.
“Los problemas se solucionan trabajando, dialogando, nunca desde el autoritarismo y la violencia. Ese no es el camino”, indicó Larreta e insistió en responsabilizar a las familias de los estudiantes que tomaron los colegios: "Nadie está por encima de la ley. Los adultos tenemos que ser ejemplo de los chicos".
Larreta vinculó la toma de los colegios con “varias expresiones violentas” que ocurrieron esta semana y que de “ninguna manera contribuyen a la construcción de la Argentina que queremos”. Sin embargo, aclaró que se trata de “pequeños grupos minoritarios”.
De hecho, relacionó la toma de los colegios con la suspensión de las PASO, algo que nunca que se llegó a discutir de manera oficial. "Todo esto es lo mismo. Es un modelo de país que fracasó y que pequeños grupos resisten con violencia porque saben que perdieron el apoyo de todos los argentinos. Eso es lo que me da esperanza. Los argentinos estamos hartos de que grupos intensos, muchas veces agresivos pero minoritarios, hagan lo que quieran y eso no tenga consecuencias", cerró.