La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner hizo su primera aparición pública tras el intento de asesinato del que fue víctima el pasado jueves 1 de septiembre frente a su departamento, en el barrio porteño de Recoleta.
La titular del Senado encabezó un encuentro a puertas cerradas con curas villeros, en el que mencionó su voluntad de lograr un “acuerdo mínimo” con los sectores opositores para encarar la “reconstrucción de la economía”.
Remarcó que los resultados no se van a lograr hablando únicamente “entre los que piensan de una manera”, sino a través del debate con todo el arco político, puntualmente con aquellos que “piensan distinto”.
Frente a los curas villeros, Kirchner hizo pesar su mensaje religioso: “Hubo un momento en que había trabajo, esperanza, expectativa y eso tenemos que volver a construir entre todos, con la actitud de hablar con todos, los que nos gustan y los que no. Como hacía Cristo”.
En ese contexto, habló de su encuentro con el economista Carlos Melconian, director del Banco Nación durante el macrismo, para ejemplificar su idea de llegar a este acuerdo “político y económico”.
“Nadie puede pensar que tenga las mismas ideas que yo –sobre Melconian- porque la gracia no está en juntarse con los que se piensa igual, sino con los que piensas distinto, lo hice para ver si en economía, al menos, podemos tener un acuerdo mínimo”, sostuvo.
Volviendo hacia atrás, Cristina expresó que esa “pasión” de la política para que la gente “vuelva a comer, a tener un trabajo” no se va a alcanzar debatiendo únicamente con los mismos sectores.
Si bien recordó que fue Presidenta de la Nación en dos oportunidades, y su “compañero” Néstor Kirchner en una ocasión, marcó que en la actualidad lo que la motiva es “ver si se puede salir” de la crisis económica en la que está sumergido el país por culpa del endeudamiento y la pandemia.
“¿Se puede construir un país y reconstruir la economía en un país donde solo se insulta y se agravia?", se preguntó retóricamente ante los curas que asistieron a la reunión en el Congreso de la Nación.
“Cuando se pone tanto adjetivo, tanto insulto, tanto agravio, es porque no se quiere discutir de economía”, sentenció.
Qué dijo sobre el intento de asesinato
"Estoy viva por Dios y por la virgen", afirmó la vicepresidenta. “Lo más grave no es lo que me pudo haber pasado a mí, lo más grave fue haber roto un acuerdo social que había desde 1983″, agregó.
Además, contó que tenía intenciones de ir a la misa en Luján pero que desistió por el operativo de seguridad que hubiese significado: “No quería entorpecer con mi presencia lo que era un momento muy especial”.
“Yo siento que la recuperación de la democracia no fue solo volver a votar, yo entiendo que recuperar la democracia fue recuperar la vida y la racionalidad de que podamos discutir política, erradicando la violencia y la verdad que lo que pasó el otro día fue algo más. Fue una ruptura de eso que tenemos que volver a reconstruir urgentemente”, advirtió CFK.}
“Fueron los militantes los que aprehendieron a quien me había intentado matar, no fue la Policía. No solo lo detuvieron, impidieron que -fracasado el primer disparo- intentó montar otra vez el arma y se lo impidieron. Pero no hicieron justicia por propia mano, ni lo lincharon, nada. Hicieron lo que le corresponde hacer a ciudadanos democráticos y cristianos. Lo entregaron a la Policía, a la ley. Y de verdad que yo no creo que haya que sancionar ninguna ley especial, las que ya están vigentes alcanzan y sobran. Hay poner mucha institucionalidad para reconstruir”.