El presidente Javier Milei, habló por la noche acerca del Paro nacional que se llevó a cabo este miércoles, con una masiva convocatoria en la Plaza de los Dos Congresos, y lo calificó como una medida de "características políticas" y apuntó contra los dirigentes de la CGT:
En una entrevista que brindó para la periodista Patricia Janot, el mandatario se expresó acerca de lo sucedido en el día de hoy con protestas en todo el país. "Esta claro que es un paro de características políticas. Es decir, nada tiene que ver con reclamos legítimos que pudieran tener los trabajadores, porque de hecho, los propios impulsadores (sic) del paro, lo han dicho y lo han partidizado de manera abierta".
"Es un tema no menor, y la verdad que en ese sentido los sindicalistas estarían jugando un rol por el cual no fueron elegidos, hacer política en el sentido de jugar donde juegan los partidos políticos", indicó Milei.
Por otro lado se refirió a las dos puntas de lanza de su gestión pero que están aún en un compás de espera en el Congreso de la Nación: El DNU y la llamada "Ley bases" o "Ley Ómnibus": "Si el DNU y La Ley de Bases fueran aprobados tal cual fueron enviados, Argentina tendría un escalamiento de 90 posiciones en el índice de libertad económica, pasaríamos a estar parecido a Francia o Alemania".
"Quiere decir que esto situaría a la Argentina en un sendero de crecimiento a largo plazo que haría que en un período de 30 años por ejemplo, pudiéramos parecernos a Alemania y multiplicar por cinco nuestro PBI per cápita", aseguró.
Al parecer el presidente decidió obviar en la entrevista para el medio colombiano, que la Ley Bases, ya fue recortada en el texto que había enviado el oficialismo, y que él mismo reconoció, con un recorte de más de 140 artículos del proyecto original.
Sobre la Ley Bases agregó: "Los únicos que se están oponiendo a esto son aquellos que tienen privilegios por estar vínculados a la política, que es eso que yo denomino casta".
"Básicamente lo que tiene que ver con los políticos corruptos, que tiene que ver con los empresarios prebendarios, con los sindicalistas que entregan a sus trabajadores, con los periodistas corruptos que en función de pauta y sobres afectan lo que dicen y son funcionales a la religión del Estado", agregó el presidente.
"Obviamente todo ese conjunto de parásitos que están arruinando la economía argentina desde hace 100 años, vuelven a hacer ruido y tratan de ejercer presión", concluyó.