La referente del Pro y precandidata a presidenta de la Nación de Juntos por el cambio (JxC), Patricia Bullrich, volvió a cuestionar el número de desaparecidos durante la última dictadura cívico militar en la República Argentina.
Durante su participación en una entrevista para el canal A24, la exfuncionaria del Gobierno de Mauricio Macri, fue consultada por el periodista Esteban Trebuc sobre si hay que discutir o no el número de desaparecidos, a lo que respondió que “lo que no podemos decir es: O decís que son 30.000 o sos un traidor a la patria".
En esa línea, Bullrich argumentó: “la base es la libertad, la base fue científica, fue la Conadep”, y agregó: “Pero, independientemente de si fueron 30 mil, o fueron 8 mil, o los que fueron, la cuestión de fondo es que la Argentina nunca más puede tener esos enfrentamientos fraticidas como los que tuvo”.
El pasado golpea la puerta de Patricia Bullrich
A tan solo días de las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), que se llevarán a cavo el próximo 13 de agosto, en la Ciudad de Buenos Aires aparecieron afiches con la frase: "Carolina Serrano presidenta", en referencia al pasado montonero de la precandidata presidencial de Juntos por el Cambio.
En el mes de mayo, se difundió a través de las redes sociales, un video que muestra a la precandidata del Pro diciendo: “Me acuerdo que una de las principales canciones que cantábamos era: ‘No somos putos, no somos faloperos, somos soldados de las FAR (Fuerzas Armadas Revolucionarias) y Montoneros’”.
Según trascendió, la exministra de seguridad de la Nación, participó en al menos dos operativos de la organización montonera y fue muy cercana a Rodolfo Galimberti, uno de los líderes de aque movimiento. Por este motivo, el periodista Eduardo Feinmann declaró “Patricia Bullrich ha hecho un camino político y ella sabe bien esto, porque antes de ser Patricia Bullrich, fue Carolina Serrano”.
En esa línea, el periodista continuó: “Pero antes de ser esta Patricia Bullrich que nosotros conocemos, era Carolina Serrano, el nombre de guerra cuando ella era de la juventud peronista montonera”.
“A ver, un empresario me contó que tuvo un encuentro con un empresario europeo que la quiso conocer y en un momento le dijo que ‘esta debe ser la primera vez que yo hablo con una guerrillera de derecha’ y ella lo tomó a bien. No se ofende. Al contrario, con orgullo”, remarcó.