Desde hace una semana y un par de días, tras su última aparición en un acto que se realizó en El Calafate, Cristina Kirchner se mantuvo alejada de la esfera pública hasta hace instantes, que reapareció con un duro tuit en el que denunció un "alquiler de cautelares" para que las empresas se lleven dólares más baratos.
La vicepresidenta de la Nación publicó un mensaje en su cuenta oficial de Twitter en el que compartió una nota del sitio web Ámbito Financiero, que explica que la Aduana descubrió una maniobra por la cual una empresa obtuvo una orden judicial contra la AFIP y se la “cedió” a otra firma importadora que no tenía una SIMI aprobada para poder ingresar mercadería y liberar dólares del Banco Central de la República Argentina.
"Alquiler de cautelares? O sea que las empresas que logran una orden judicial para llevarse dólares oficiales del BCRA, además las alquilan? Esa sí que no la tenía", comenzó la expresidenta en su perfil en la red social del pajarito.
Finalmente, completó: "Con este funcionamiento judicial y empresario, Argentina se vuelve casi una misión imposible".
El periodista Gabriel Morini, de Ámbito, detalló en su artículo el caso de una empresa que obtuvo una medida cautelar a su favor que obligó al BCRA a liberarle dólares para la importación y que luego le cobró a otra firma sin autorización de la entidad financiera para que pueda importar utilizando esa misma sentencia judicial.
El alquiler de cautelares que denunció Cristina Kirchner
La Aduana expuso en un comunicado que descubrió "una maniobra por la cual una empresa obtuvo una medida judicial para poder importar sin SIMI (autorización para la importación) y, luego, 'alquiló' esa cautelar a otra firma importadora que no tenía una SIMI aprobada para poder ingresar mercadería (carteras fabricadas en China) y conseguir los dólares del BCRA".
El caso es el de la compañía Yoko S.A, que recibió autorizaciones judiciales a través de medidas cautelares para importar mercadería evitando el requisito de validar la SIMI, pero luego “cedió” la autorización a otra firma, Tropea SA (una empresa dedicada a la importación y venta de marroquinería con marca propia), para que esta última usufructúe la medida judicial y pueda importar carteras fabricadas en China sin SIMI aprobada.
En un escrito presentado el viernes, la Aduana denunció que Yoko S.A no usó la cautelar en los términos en los que la obtuvo y que transfirió la tutela de la medida judicial en beneficio de Tropea S.A. La Aduana expuso ante la justicia una simulación de Yoko SA mediante un “contrato” de autorización para comercializar la marca “Tropea” solo por un mes: entre el 21 de junio y el 21 de julio de 2022, es decir, "justo el momento en el que la mercadería debía ser nacionalizada con la SIMI preautorizada de Yoko", explicó la propia Aduana.
El organismo dirigido por Guillermo Michel agregó en el texto: "En términos llanos, Yoko le “alquiló” la cautelar a Tropea para que pudiera hacerse de su mercadería (carteras de origen chino). En definitiva, Yoko funcionó como una usina de SIMI"
