En su discurso, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, pidió un nuevo "Nunca Más" pero con la Justicia y cuestionó la independencia real del poder Judicial así como también criticó su rol en los últimos cuatro años donde se llevaron adelante "detenciones arbitrarias".
El exjefe de Gabinete instó a “mejorar la calidad de los derechos humanos y cívicos" y aseguró que se vienen nuevos tiempos: "el de 'ciudadanizar' la democracia". Por ende, ratificó su decisión de realizar una reforma judicial.
No obstante, Fernández aseguró que existe “una democracia con cuentas pendientes” y advirtió que “sin justicia realmente independiente no hay democracia”.
"Nunca más una justicia contaminada con los servicios de inteligencia, nunca más una Justicia contaminada por operadores judiciales, procedimientos oscuros y linchamientos mediáticos", aseveró el flamante jefe de Estado, quien además aseguró una urgente intervención de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).
Asimismo, para combatir la pobreza del 41% que heredará del gobierno de Mauricio Macri, creará un sistema masivo de créditos no bancarios a tazas bajas, debido a "los altos niveles de endeudamiento para pagar alimentos, remedios o facturas de servicios".
Por ende, también declaró la "emergencia sanitaria" y que en ese marco en el que la actual secretaría de Salud volverá a obtener un rango ministerial, aseguró que otorgará medicamentos y vacunas gratuitas para los jubilados que menos cobran.
"La participación del sector Salud en el presupuesto público bajó 45 por ciento en los últimos cuatro años", remarcó Alberto en su declaración en la Cámara de Diputados, pero esperanzó: "Las argentinas y los argentinos van a volver a tener derechos a una atención de salud oportuna y de calidad".
