En el día de ayer la ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, realizó polémicas declaraciones sobre los chicos que abandonaron la escuela durante la pandemia, durante una entrevista para Radio Rivadavia.
La funcionaria porteña aseguró que los jóvenes que abandonaron el colegio “deben estar perdidos en los pasillos de una villa o ya cayeron en el narcotráfico” y que por eso no irán a buscarlos.
Desde el primer momento sus declaraciones generaron controversias en torno a su figura y no es la primera vez que queda en medio de un escándalo como responsable de la educación en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Los comentarios en repudio de dirigentes políticos y de la comunidad educativa no tardaron en llegar, como es el caso del diputado nacional del Frente de Todos, Leandro Santoro, quien compartió el siguiente mensaje en su cuenta oficial de Twitter:
Por su parte, el Secretario General de Suteba, Roberto Baradel, consideró que los dichos de Acuña “desprecian a la educación pública y tienen una concepción clasista y discriminatoria”. Al contrario, destacó la gestión de la Provincia para crear programas adicionales y agregar a más de 30.000 docentes extras.
“Se muestran tan cual son: desprecian la educación pública y a los sectores populares. Teniendo el presupuesto más importante del país, la ministra no invierte para ir a buscar a esos chicos y revincularlos nuevamente a las escuelas”, agregó.
De la misma forma se expresó la líder del gremio docente UTE-Ctera, Angélica Graciano, al afirmar que Acuña hizo una declaración “sumamente discriminatoria y clasista”, en la medida que recordó: “No han tenido políticas para mantener a esos jóvenes, ni siquiera distribuyeron las computadoras”.
