Por Cynthia García y Pablo Di Pierri
“El futuro comienza ahora. De la Pandemia a la Utopía” es el libro del sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos escrito en 2020, magnífico y realista dice: “El presente terminó sin darnos cuenta. Los siglos comienzan cuando imprimen su marca en el mundo, es decir, cuando inscriben su aura o su trauma específico en los cuerpos de vastos sectores de la población en diferentes partes del mundo”.
"…El nuevo siglo comenzó ahora, en 2020, con la pandemia y pase lo que pase…”.
En ese pase lo que pase estamos. Atrapados en una construcción de dominación constituida por el capitalismo, el colonialismo y el patriarcado. Ninguno de estos tres unicornios por separado tiene el poder de dominar. Solo los tres juntos son todopoderosos. Sin embargo las respuestas suelen ser por separado. Y ahí vamos con unas sensación de agotamiento político e ideológico. El sociólogo antiglobalización que estamos citando sostiene que la sensación que invade al mundo es la de estar viviendo entre ruinas.
Él aclara que es una sensación eurocéntrica o del Norte Global, “la experiencia existencial de vivir ante un paisaje de cimientos que se desmoronan”. Dice Boaventura: “Es una experiencia nueva solo para el Norte Global. Desde el siglo XVI, las conquistas impusieron a los pueblos conquistados esta misma experiencia. Desde entonces, el Sur global se acostumbró a vivir entre ruinas y a resistir e innovar a partir de estas”.
Así nos encontramos por estas latitudes, en un año electoral, con esa sensación de agobio ideológico y las chispas luminosas de la experiencia de saber reconstruirnos desde las ruinas tantas veces…Mientras tanto la política permanece capturada por el poder económico y el peronismo no define sus candidaturas porque la discusión interna pasa, centralmente, por la persecución mafiosa contra la vicepresidenta Cristina Kirchner y el agobio frente a un gobierno de coalición que cumplió poco, mal o regularmente sus promesas de campaña.
En este contexto, sindicatos y organizaciones políticas kirchneristas activaron un operativo clamor para que la ex presidenta vuelva a figurar al tope de la boleta oficialista. Las especulaciones sobre el destino de Cristina recorren toda la escala cromática: hay quienes creemos/deseamos que será candidata a presidenta, otros sugieren que podría ser senadora nacional por la Provincia de Buenos Aires y no faltan quienes advierten que tal vez no sea candidata.
Pero si yo les pregunto a ustedes que están escuchando:
- ¿No querrían acaso, con todas sus ganas que lo fuera?
- ¿Quién -además de Cristina- puede devolverle la mística a esta inacción que vivimos?
- ¿Quién podría batallar mejor contra los unicornios feroces de domiancion que describíamos: capitalismo, colonialismo y patriarcado?
- ¿Si pertenecés al campo nacional y popular, ¿Cuál cartel de salida mejor ves?
Así como este tiempo de pandemia y probablemente pandemias intermitentes no nos da opción, nos pone ante un dilema: o cambiamos la forma en que vemos la naturaleza o ella comenzará a escribir el largo epitafio de la vida humana en el planeta, de la misma manera creo que en la Argentina estamos ante la misma situación dilemática frente a un proyecto de derecha que ya conocemos devastador. Como en la saga Avengers, quizas sea esta la batalla final.
