Este jueves renunció Boris Johnson a su cargo de primer ministro de Reino Unido. El mandatario ocupó ese lugar durante tres años en los que le tocó enfrentar el Brexit, la pandemia de coronavirus y los crecientes escándalos.
Su dimisión se da en el marco de una serie de renuncia de sus ministros en protesta por su liderazgo. Johnson confirmó que permanecerá en el cargo hasta que encuentren un reemplazante para ocupar su lugar.
"Es claramente la voluntad del partido conservador parlamentario que debe haber un nuevo líder de ese partido y, por lo tanto, un nuevo primer ministro", indicó el jefe de Estado en un discurso que dio en Downing Street y señaló que el proceso de buscar un nuevo referente "tiene que empezar ahora".
Por otra parte, Johnson dijo que se sentía "inmensamente orgulloso" por hacer frente al Brexit, a la crisis sanitaria desatada por el covid-19 y por hacer frente a los ataques rusos sobre Ucrania.
El jefe de Estado aseguró que estaba triste por tener que "renunciar al mejor trabajo del mundo” y en las últimas horas justificó seguir luchando para cumplir el mandato que ganó en las elecciones generales llevadas a cabo en diciembre de 2019. “Sentía que era mi trabajo, mi deber, mi obligación seguir lo que comenzamos en 2020″, aseveró.
La respuesta de la oposición
El laborista líder de la oposición, Keir Starmer, aseguró que la futura partida de Johnson es “una buena noticia”, pero no basta.
“Necesitamos un verdadero cambio de gobierno”, declaró considerando una moción de censura contra el gobierno para precipitar la convocatoria de elecciones generales anticipadas.
El detonante que provocó la salida de Johnson del gobierno fue la renuncia de casi 60 miembros de su gobierno. En los últimos días habían dimitido dos funcionarios de peso en su equipo: el ministro de Finanzas, Rishi Sunak, y el de Sanidad, Sajid Javid.
Sin embargo, Johnson quiso mantener su gobierno a flote y nombró a nuevos ministros para reemplazar a los que dejaron su gabinete.
Pero la salida el jueves de la ministra de Educación, Michelle Donelan, y la presentación de de renuncia del ministro de Finanzas, Nadhim Zahawi, que duraron en sus puestos solo durante dos días, parecieron inclinar la balanza junto con advertencias de una nueva moción de censura por parte de los parlamentarios conservadores.
El embajador de Estados Unidos le pidió a Reino Unido abrir el diálogo por Malvinas
El embajador de los Estados Unidos, Marc Robert Stanley, participó de una reunión con los miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores y Culto del Senado donde pidió que Argentina y Reino Unido recuperen el diálogo para discutir sobre la soberanía de las islas Malvinas.
"Estoy aprendiendo mucho sobre la cuestión Malvinas y si tuviera una forma de solucionar esto lo único que puedo decir es que me gustaría ver una negociación entre las dos partes. En el G7 Boris Johnson manifestó su interés para reiniciar las negociaciones", aseveró Stanley desde el Congreso.
"Me di cuenta de que Malvinas es un tema muy emotivo para ustedes. Odio esa disputa por varias razones. No podemos venderles armas a la Argentina que contengan partes británicas. Además, el conflicto impide que haya más inversiones inglesas en la Argentina", agregó el embajador.