Si hay un jugador que el hincha de Boca recuerda y muy bien de la década del '90, ese es Alberto Márcico. El Beto, surgido de Ferro y con paso por el Toulouse de Francia, arribó al Xeneize en 1992, año en el que obtuvo el tan recordado Torneo Apertura. Con la camiseta azul y oro, disputó un total de 154 partidos y marcó 15 goles, desempeñándose en la clásica posición de enganche. Además del mencionado campeonato local, también fue campeón con Boca de dos competencias internacionales: Copa Máster de Supercopa 1992 y Copa de Oro 1993. Sus otros dos trofeos como futbolista los consiguió en Ferro, consagrándose en los Campeonatos Nacionales de 1982 y 1984.
Hoy, ya alejado de lo que es el fútbol y viviendo tranquilamente, el Beto recordó varios momentos de su etapa como jugador pero también de hincha. En este sentido, rememoró una de sus primeras locuras como fanático del Xeneize, la que le costó el trabajo: "Toda mi vida fui hincha de Boca, desde los 12 años soy socio. Mi gran recuerdo como hincha es el viaje a Uruguay para el partido con Cruzeiro. Cuando volví mi viejo me cagó a trompadas, porque vine a los tres días y me echaron del laburo", contó en diálogo con Libero vs de TyC Sports.
Su exceso de peso, la costumbre del Champagne y la adicción a la Coca Cola
Siguiendo el hilo de las preguntas del programa Libero vs, el Beto contó diversas anécdotas, entre ellas, reconoció su exceso de peso en la época en que se cayó el alambrado de La Bombonera y lo que le gritaba la gente: "Cuando me caí del alambrado estaba un poco excedido de peso, ja. Pero el alambrado no estaba en muy buenas condiciones. En un partido contra Rosario Central uno me gritó que parecía un termotanque de mil litros y tenía razón, estaba un poco excedido, ja".
Por otra parte, contó una increíble costumbre que tenía con el Champagne, y reconoció una adicción con la Coca Cola: "En Boca tenía la costumbre de llevar dos o tres botellas de champagne a la concentración porque nos quedábamos tres días encerrados. Las dejaba en la bañadera con hielo", comentó, y agregó: "Era adicto a la Coca Cola, tomaba siete litros por día. En Francia estuve internado y tuve que dejarla. Desayunaba, almorzaba, merendaba y cenaba con gaseosa".
El día que casi "cuelga" a Mac Allister
Por otra parte, confesó que en una serie de partidos en la que el Colo Mac Allister (concentraban juntos) no estaba jugando bien, lo apretó dentro de la habitación. A partir de allí, cambió el desempeño del Colorado: "Una vez Mac Allister había jugado mal y cuando llegó a la habitación lo esperé con un banquito y una sábana atada al ventilador. Le dije ponete la soga que yo te pateo el banco. Desde ahí empezó a romperla y no concentró más conmigo".
Elogios al Riquelme jugador y dirigente, y chicana a River
Por último, llenó de elogios a Juan Román Riquelme, no solo por lo que significó como futbolista en la historia del Xeneize, sino por el trabajo que se encuentra realizando desde que forma parte de la dirigencia: "Riquelme es el jugador más importante de la historia de Boca, por lejos", expresó el Beto, y agregó: "Riquelme sabe reconocer el ADN bostero en los jugadores. Desde que volvió a Boca, la historia con River cambió. Es creer o reventar", manifestó, y cerró con una chicana para River: "Es más grave irse al descenso que perder una final. Para un equipo como River es terrible. No se puede comparar".