La vicepresidenta Cristina Kirchner encabezó un acto en El Calafate e instó a dejar de "discutir personas" y comenzar a "discutir políticas". También, criticó duramente al ex ministro de Economía, Martín Guzmán, por la forma en la renunció y convocó a llegar a un consenso nacional para dar respuesta a la economía bimonetaria.
"Se pueden hacer políticas mejores, no porque soñemos con utopías, sino porque ya las hemos hecho. Por eso, es importante que en la Argentina dejemos de discutir a las personas y comencemos a discutir las políticas", aseveró la ex presidenta junto a la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner y del ministro de Educación, Jaime Perczyk.
En su discurso, Cristina cargó contra la economía bimonetaria y la brecha cambiaria que se ha profundizado en los últimos días. Al respecto, instó a dar un debate profundo y en serio: "La patria y el país merece una discusión en serio de los problemas que tenemos los argentinos en un mundo donde todo tiende a agravarse".
"Esta muy feo a fuera, les pido que hagamos, mas allá de las ideas... ni yo voy a renunciar a mis ideas, a mi historia y lo que creo y tampoco les voy a pedir a nadie que renuncie a la de ellos. Tenemos que encontrar un punto de coincidencia en común porque no va haber Argentina para nadie", arremetió.
En esa línea, apuntó: "Los que tenemos convicción y responsabilidad política... hoy la política parece un lugar muy tranquilo y agradable, pero la política cuando yo era chica, era un lugar peligroso e inhóspito, que se hizo un agujero negro y desaparecieron miles de argentinos. No confundan, la política no es lo que quieren hacer creer a los argentinos".
"Sin rencores pero con muchas ideas y con mucha esperanza de que podamos hacerlo, debemos autoconvocarnos para la construcción de una Argentina en paz que presupone una argentina con paz social", sentenció.
En su discurso, comenzó hablando de Aerolíneas Argentinas y del PreViaje, pero, en un momento que se tomó para elogiar la gestión de Alicia Kirchner en Santa Cruz, recordó que la hermana de Néstor Kirchner había sido ministra de Desarrollo Social de la Nación. Mientras elogiaba su entonces gestión, aclaró: “No voy a revolear a ningún ministro, quédense todos muy tranquilos”.
“Esta señora antes de ser gobernadora fue ministra de Desarrollo Social, cuando asume acompañando a su hermano recibe al mes de ingresar como ministro 220 millones de planes Jefes y Jefas. Una política de (Eduardo) Duhalde que lo hizo bien porque la crisis del 2001 fue importante. Esta mujer las recibió y a partir de ahí se desarrolló una política para ir acomodando a ese universo que quedaron afuera al mundo productivo que los empoderen para que cunado la economía crezca tengan los instrumentos para ser absorbidos por la economía real”, agregó.
Sobre la renuncia de Guzmán
La vicepresidenta Cristina Kirchner lanzó duras críticas contra el ex ministro de Economía Martín Guzmán por la forma en la que renunció el sábado pasado y advirtió que su renuncia "fue un acto de desestabilización" política en medio del clima de crisis que atraviesa el país.
Durante un acto en Calafate, la ex presidenta aseveró que "la intempestiva renuncia del ministro de Economía fue un inmenso acto de irresponsabilidad política".
Además, consideró que por cómo está "el dólar y el mundo" haberle comunicado su renuncia al presidente Alberto Fernández por Twitter "fue un acto de desestabilización". "Hacerlo enterar al Presidente de una renuncia por Twitter no me parece bien, y también es de una inmensa ingratitud personal hacia el Presidente", resaltó Cristina Kirchner.
A la vez, se hizo eco de las críticas de los medios hegemónicos que la responsabilizaron por la salida de Guzmán e ironizó: "No se preocupen que no voy a revolear a ningún ministro, quédense tranquilos".
Y sentenció: “Tenemos que tener responsabilidad política ante la sociedad. Fue un acto de desestabilización institucional. Cómo está el mundo, cómo está el dólar, hacerlo enterar al Presidente de una renuncia por Twitter no me parece bien. No me parece bien por la sociedad en su conjunto y finalmente me parece un gesto de ingratitud hacia el propio Presidente. No niego las diferencias, pero este Presidente había bancado a ese ministro como a nadie enfrentado inclusive con su propia coalición. ¿Se merecía eso?”.
Además, recordó las diferencias que se iniciaron con Guzmán a raíz de las negociaciones con el FMI: “Todo el arco político opositor, todo el periodismo en general, todo el stablishment salió a hablar de la racionalidad del ministro y adivinen quién era la irracional”. En ese sentido, la vicepresidenta insistió en la necesidad de “discutir ideas y no personas”.