La Cámara Federal pidió elevar a juicio oral a Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo, los miembros de la “Banda de los Copitos” y principales acusados por el intento de asesinato contra la vicepresidenta Cristina Kirchner.
A contramano de los que buscaba CFK, la Cámara le pidió a la jueza María Eugenia Capuchetti que cierre la instrucción del caso antes de que aparezca alguna conexión indeseada para la oposición en un año de elecciones.
De esta forma, los camaristas Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens buscan apurar el cierre de la investigación, elevar a juicio a los procesados y que el expediente pase finalmente a un tribunal oral.
“Instar a la jueza que frente a la situación de detención de los imputados y el estado de la investigación a su respecto, se proceda con la celeridad que el caso requiere a fin de avanzar en el estado procesal”, determinaron.
Así lo resolvieron los jueces en un fallo firmado esta tarde, en el que además volvieron a rechazar la prisión domiciliaria que había solicitado Carrizo, el jefe de la banda que fue procesado como partícipe secundario del plan.
A pesar de ello, el fallo que apura la instrucción del caso responde a la petición del abogado de Carrizo en relación al pedido de domiciliaria para su cliente. Para los magistrados, la mejor solución fue acelerar la elevación a juicio oral.
“Más allá de que el plazo del proceso no parece excesivo para las distintas hipótesis de investigación que sugiere la querella lo cierto es que luce inadmisible que no se haya elevado a juicio el hecho principal cuando la investigación a su respecto se encuentra agotada y con sus imputados en detención preventiva”, consideró el camarista Llorens.
Tanto Carrizo como Montiel y Uliarte tienen sus procesamientos confirmados y los jueces rechazaron en reiteradas ocasiones los pedidos de prisión preventiva. Es por eso que consideraron que es “el tiempo óptimo” para avanzar.
El atentado contra Cristina Fernández de Kirchner ocurrió la noche del 1° de septiembre de 2020, cuando la vicepresidenta llegaba a su departamento de Juncal y Uruguay en el barrio porteño de Recoleta.
Sabag Montiel y Brenda Uliarte aprovecharon la multitud que movilizaba en la calle donde vive CFK desde el día en el que fiscal Diego Luciano pidió 12 años de prisión por asociación ilícita y defraudación al Estado, como también la prohibición de ejercer cargos públicos.
Entre toda esa gente, Montiel se acercó y le gatilló dos veces en la cabeza con una pistola Bersa calibre .32. Sin embargo, la bala no salió porque no estaba cargada en la recamara y terminó reducido por militantes.
