Productores yerbateros comienzan este lunes el paro de la zafriña (cosecha de verano) de yerba mate por cuatro meses (desde el 2 de diciembre al 31 de marzo 2025).
Esta medida, impulsada por alrededor de 200 productores de la provincia, es en reclamo de 450 pesos por el kilo de hoja verde y la regularización del Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym), desregulado por el Decreto de Necesidad y Urgentica 70/23 del Gobierno Nacional. La misma afectará a miles de familias de tareferos, quienes quedarán sin trabajo y, por ende, sin ingresos.
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Sucede que la desregulación del Instituto no solamente afectó al productor yerbatero que debe entregar la hoja verde a secaderos por montos que oscilan entre los $170 y $230 y con pagos con cheques posdatados de entre 30 y 60 días, sino que también reflejó la desigualdad estructural entre los diferentes eslabones de la cadena productiva, siendo los tareferos los más afectados.
Sumado al paro, el próximo jueves 5 de diciembre habrá una marcha federal que tendrá epicentro en Plaza de Mayo, con el objetivo de visibilizar los reclamos del sector, que a inicios de año dejó de tener precios de referencia por la promulgación del DNU 70/2023, que retiró las facultades regulatorias del YNYM.
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Los motivos del paro de yerbateros
Marcelo Hacklander, miembro del directorio del Instituto Nacional de Yerba Mate, explicó que el paro es en reclamo de un mayor precio en lo que perciben por cada kilo de hoja verde, debido a “un combo explosivo” que perjudica al sector.
En declaraciones al programa “Hermosa mañana” por Radio Splendid, el dirigente explicó que como “parámetro general” los productores se manejaban históricamente con “un valor del 10 por ciento del paquete en góndola”, mientras que hoy el valor que reciben es "de 180 pesos por kilo de hoja verde y los paquetes no bajan de 4.000 a 5.000 pesos”, se quejó.
Hacklander explicó que la ausencia de regulación se agravó con una cosecha récord de 968 millones de kilos de materia prima, cuando el promedio anual venía rondando los 850 millones.
“Es un combo explosivo, una superproducción de hoja verde de 968 millones de kilos y encima hay una merma en el consumo”, aseguró, y dijo que “hay alguien que se está quedando con una diferencia muy importante" que debería llegar a quienes producen.
De acuerdo a sus dichos, el escenario del sector yerbatero llegó a un punto considerado “insostenible por los productores”, que decidieron en asambleas paralizar la “zafriña” hasta marzo del año próximo si no obtienen respuestas a sus reclamos.
“Somos alrededor de 13.500 productores en total y 12.500 somos pequeños y medianos, de entre 5 y 15 hectáreas de producción, que vivimos de esto junto con nuestras familias, y vivimos una situación extrema”, enfatizó Hacklander.
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¿Peligra el abastecimiento?
Esta medida se realiza como estrategia que apuntaría a desequilibrar el abastecimiento en góndola, obligando a los molinos a pagar un mayor precio por la hoja a los productores.
De todas maneras, Hacklander advirtió que los consumidores no deben temer a un desabastecimiento, ya que “hay stock para un año y medio para abastecer a la Argentina. "No hay excusa para que falte yerba en las góndolas”, expresó.
