"Jugar contra River me da igual", aseguró Felipe Melo en conferencia de prensa tras la derrota 0-2 de Fluminense ante River en el Monumental. Sin embargo, el brasileño parecería haber tenido una noche muy particular y supo ser protagonista en varias oportunidades.
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Teniendo en cuenta que más de una vez declaró ser fanático de Boca y que ya se había despachado con algunas cargadas luego del 5-1 en Brasil, esta vez Melo fue foco de gastadas de parte de todo el estadio. De hecho, en medio de un abucheo profundo de los hinchas millonarias, el ex-Inter estalló de bronca cuando se retiraba del campo de juego y se despachó con varios gestos repudiables contra la parcialidad local.
Sus acciones no pasaron desapercibidas para nadie, ni siquiera para la Policía de la Ciudad que al termino del partido se acercó al vestuario visitante para comunicarle a Felipe Melo que le labraron un acta por incitación a la violencia.
Primero, el exjugador de Juventus se retiró del campo de juego haciendo la gallinita. Después armó una B con sus dos manos y también un 5 recordando lo que pasó en el Maracaná. Todo hizo el defensor de Fluminense mientras gran parte de los 86 mil espectadores se encargaba de abuchearlo e insultarlo.
La eufórica reacción de Felipe Melo por un lateral:
Otra secuencia que sorprendió a más de uno ocurrió a los 19 minutos del primer tiempo, cuando Melo disputó una pelota con Nicolás De la Cruz. El defensor brasileño explotó luego de que el uruguayo fuera a pelear con él una jugada al lateral y le festejó de manera muy eufórica en la cara de su rival.
De la Cruz saltó bien alto, logró ganarle la posición a Guga y cabeceó hacia la zona del lateral buscando desactivar una potencial contra rival. Y viendo que el elemento todavía estaba dentro del campo, fue a pelear la dividida con Felipe Melo. El uruguayo no llegó cómodo al duelo y le dio un leve empujoncito con el cuerpo a su adversario. Sin embargo, la reacción de Felipe Melo fue desmesurada: prácticamente pecheó a De la Cruz mientras lanzaba un grito desaforado.
"Especial es jugar contra Boca Juniors, jugar contra River es un partido normal para mí", sostuvo más tarde el mediocampista brasileño en conferencia de prensa. Además, agregó: "Especial es jugar con la camiseta de Fluminense, la Copa Libertadores. Esto fue normal, entre en el campo e intente ayudar a mi equipo de la mejor manera posible" y volvió a repetir: "Especial es jugar con Boca, contra River da igual".
"Acá jugamos una final, sobre todo para River. Si no ganaba o empataba estaba afuera. Nosotros cuando jugamos en casa en el Maracaná, sobre todo el primer tiempo River hizo demasiadas faltas y el árbitro no cobró, hoy lo mismo", acusó el brasileño sobre el trabajo de Wilmar Roldán.
Y continuó: "Hay que ver eso porque jugas contra un equipo fuerte que empieza a hacer faltas, pegar patadas y el árbitro no pita es más difícil todavía. Nosotros tenemos confianza que partido a partido podemos mejorar y ganar la Copa".
