El pasado 3 de octubre, Gonzalo Higuaín sacudió al fútbol internacional al anunciar su retiro del fútbol profesional. A sus 34 años, el Pipa confirmó la triste noticia en una conferencia de prensa y manifestó que jugaría hasta el final de la temporada. Con la ambición ganadora de siempre, el delantero de Inter de Miami decidió mantenerse en ritmo para pelear por el título de la MLS, competencia que hoy lo tiene cómo uno de los máximos goleadores.
Sin embargo, la ilusión se terminó rápido porque este lunes, el conjunto de Florida cayó por 3-0 ante New York City en los playoffs de la Conferencia Este, quedó eliminado en la recta final y marcó el final de carrera para el ex jugador de la Selección Argentina. Emocionado hasta las lágrimas, Higuaín finalizó su etapa cómo jugador profesional tras 17 años, en la cuál acumuló de 300 goles y 100 asistencias en 700 partidos disputados.
El gol anulado de Higuaín:
El Pipita fue uno de los jugadores más activos durante el partido e incluso podría haber tenido la gran despedida con un gol. Sin embargo, con una reacción rápida del línea, el tanto terminó anulando por posición adelantada. Luego, en el segundo tiempo, tuvo otra gran jugada, en la que enganchó y remató de derecha a colocar, pero la pelota se fue a penas desviada.
Fue un partido muy complicado por la intensa lluvia que afectó el campo de juego. Sin embargo, sobre el final el resultado quedó a un costado y todas las cámaras apuntaban hacia Higuaín, quién no pudo mantener la emoción y recibió el abrazo y el apoyo de todos sus compañeros y rivales. Con lágrimas, el Pipita se arrodilló dos veces y terminó muy conmovido por su despedida como jugador profesional.
"Fueron 17 años de carrera y se me vienen muchas imágenes a la cabeza. De lo que viví, luche y me esforcé. Me voy con la conciencia tranquila sabiendo que di todo hasta hoy. Di todo lo que podía dar y más", aseguró Higuaín en conferencia de prensa. "Quiero que me recuerden como persona, porque a la larga es lo que más importa. Saber que lo mental es lo más importante. Estar alineado mentalmente es lo que te lleva más cerca a tener éxito”, reflexionó después.
“Jugar solo por amor a la pelota, esto me lo devolvió esta liga y este club. Pasé un año maravilloso más allá de este final. Me voy orgulloso de todo lo conseguido, y de los compañeros con los que me tocó jugar, del entrenador, de los fans”, destacó, mientras que concluyó: "Se acaba lo que más amé en la vida como trabajo”.
En su paso por el fútbol estadounidense, el Pipa sumó 69 partidos, dónde marcó 29 tantos y 11 asistencias, e incluso vivió una experiencia familiar inolvidable que tenía pendiente hace algunos años: Gonzalo se reencontró con su hermano mayor Federico, quien se retiró el año pasado con la misma camiseta. Juntos compartieron la ofensiva en 25 ocasiones.
Antes de llegar en la MLS, el Pipita fue una de las grandes estrellas que pasó por Juventus, donde obtuvo el título de la Serie A en sus tres temporadas seguidas. Además, consiguió la Copa Italia dos veces y llegó a la final de la Champions League en 2017 ante Real Madrid.
Además, en su extensa carrea, siempre serán recordadas sus etapas en el Merengue, Napoli, Milan y Chelsea, donde acumuló un total de 228 goles y 85 asistencias en 450 partidos
