Se desarrolla una nueva jornada del juicio contra los rugbiers por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell y a medida que pasan los días se recolectan nuevas pruebas de que los asesinos mataron al joven a sangre fría y se enorgullecieron por ello.
Hoy fue el turno de la testigo Andrea Ranno, recepcionista del hotel Inti Huasi, ubicado a una cuadra del boliche Le Brique, quien dio un testimonio importantísimo y cruel sobre lo que escuchó decir a los rugbiers cuando pasaron por la puerta del establecimiento aquella fatídica madrugada.
La mujer estaba en la puerta del hotel donde trabajada cuando vio pasar a los acusados en su retirada de la escena del crimen, rumbo a su casa minutos después de terminar con la vida de Fernando.
“Le rompí toda la jeta” y “le llené la jeta de sangre”, fueron algunas de las desgarradoras frases que Andrea Ranno escuchó salir de la boca de los rugbiers. Además, contó que los vio riéndose y festejando entre ellos por lo sucedido.
“Todos se sentían partícipes de ese festejo”, afirmó la recepcionista esta mañana en lo que fue la quinta jornada del juicio ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Dolores. A su vez, dijo que los asesinos “venían muy exaltados, muy contentos. Contentísimos y felices”.
Ranno fue muy precisa al describir a Máximo Thomsen y dar características de cómo lo vio la madrugada del crimen: “El que iba adelante iba con la camisa oscura abierta, bermudas y caminaba desaforadamente con los puños cerrados, sacado. Los que venían atrás iban muy relajados. Contentos”, agregó.
La mujer fue una testigo clave al momento de la detención de los rugbiers en enero de 2020. Ese mismo día dio indicaciones precisas a la policía de que había visto pasar a los acusados por la puerta del hotel y en la dirección en la que habían seguido su camino. La casa en la que se hospedaban estaba a tan solo una cuadra.
Otro testigo comprometió a Thomsen y dijo que le "dos puntinazos en la cabeza" a Fernando
Un joven que estaba en el boliche "Le Brique" de Villa Gesell el 18 de enero de 2020 y presenció el ataque afuera contra Fernando Báez Sosa aseguró este jueves al declarar en la ciudad bonaerense de Dolores en el juicio por el crimen que vio cuando el rugbier Máximo Thomsen le pegó "dos puntinazos" en la cabeza a la víctima cuando ya estaba en el suelo, y apuntó a Ciro Pertossi como otro de los agresores que lo golpeó "en la espalda y costado" también en el piso.
"Cuando lo veo de frente, está pegando, golpeando al chico que después fallece, y recuerdo que ya casi al final le pega dos patadas en la cabeza, como puntinazos, y después recuerdo que lo agarra de la cabeza y le vuelve a dar dos o tres patadas", describió el testigo Tomás Bidonde, en directa referencia Thomsen.
El joven mencionó luego en su declaración ante el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Dolores que Ciro Pertossi también goleó a Fernando "en espalda y costado" cuando estaba en el piso, en la primera referencia puntual a este acusado por parte de un testigo desde el inicio del juicio.
Aunque no precisó sus nombres, señaló que al menos otros dos agredieron también a Báez Sosa frente al boliche: "A Fernando veo que le pegan cuatro, en principio".
