Hoy, 3 de junio de 2021, se conmemora un nuevo #NiUnaMenos, el trascendental movimiento de mujeres que lucha contra la violencia de género, los femicidios y la injusticia patriarcal, y que, desde su primera edición en 2015, asombra con su masividad y preponderancia frente a otras consignas. Y si bien la pandemia nos obliga nuevamente a dejar de lado nuestra presencia en las calles y los abrazos con nuestras compañeras, la convocatoria en redes sociales se hace notar.
Si hacemos un viaje al pasado y nos detenemos en el año 2015, la realidad de aquel entonces nos arrojaría un femicidio cada 37 horas, nos mostraría a mujeres desprotegidas por políticas marginales, sin apoyo del Estado ni la sociedad. Quienes atravesamos estos años al pendiente de la lucha feminista, no podemos negar que se ampliaron los derechos de las mujeres en Argentina, que se llevaron adelante políticas públicas como el Registro de Femicidios, la Ley de Protección Integral a las Mujeres, la creación de centros de contención, la Ley Micaela, la despenalización del aborto, entre otras; sentimos que nuestro mundo empezaba a atravesar la transformación que exigimos.
Sin embargo, a partir de una investigación llevada adelante por Horus Inteligencia Cognitiva sobre el tratamiento de cuestiones de género en los medios y la opinión pública, podemos afirmar algo que en realidad ya sabíamos: aún queda mucho camino por recorrer.
En principio, la agencia llevó a cabo una investigación de 25633 menciones en redes sociales que se relacionaban con temas de género, tan solo en marzo de este año. El análisis arrojó que, el 48% de la información que se brinda en los medios de comunicación corresponde a noticias sobre el #8M, mientras que la violencia de género ocupa un 34% del espacio mediático y que el 18% restante gira en torno a cuestiones “generales”. Ahora bien, lo que respecta a opinión pública, el 49% de los usuarios habla del #8M, el 21% de violencia de género, y el 30% de generalidades relacionadas con temas de género.
En consiguiente, y profundizando sobre los resultados que se obtuvieron en primera línea, desde Horus dan cuenta que cuando los medios de comunicación mencionaban el #8M, era casi exclusivamente informativo: el 74% de dicha información correspondía a datos sobre el paro, las movilizaciones y a declaraciones de figuras públicas. Solo el 16% del tratamiento hace hincapié en las políticas públicas y en la igualdad de género, que irónicamente es por lo que se conmemora el Dia de la Mujer. Teniendo en cuenta este dato, desde la agencia demostraron que la mayoría de la sociedad está en contra de la movilización y hasta les parece violenta, paradójico.
Hablemos de violencia de género. El femicidio es la forma más extrema de ejercer esa violencia. En los medios de comunicación, el 34% de la información brindada corresponde a dicha problemática, sin embargo, desde la agencia destacan que mayormente (en un 74%) se notician los casos concretos de diferentes tipos de violencia de género, mientras que el restante 23% corresponde al tratamiento de políticas públicas y justicia. Lo escalofriante de este porcentaje se relaciona con la opinión de la sociedad, que en su mayoría reacciona con indignación... contra la víctima, a quien culpan y ridiculizan.
Por último, desde Horus contabilizaron un 18% de la información dada en marzo por los medios de comunicación que no correspondía ni al #8M ni a las violencias de género, sino que da cuenta de otras cuestiones, mucho más generales. En este sentido, se dejaron ver notas de opinión sobre el movimiento feminista, debates sobre la despenalización del aborto y sobre el uso del lenguaje inclusivo, lo cual en total ocupa un 30% del espacio audiovisual, un 26% corresponde a la difusión de historias personales de cambio de género; por debajo nos encontramos con el tratamiento de nuevas políticas públicas, con un 22% de espacio. Por último, un 13% en igualdad de género y también se habla de religión, que ocupa el 9% del espacio. Cabe destacar que en lo que respecta a la opinión pública no hay un consenso con la iglesia, de hecho, la investigación demuestra que hay desacuerdos con dicha institución. Lamentablemente no ocurre lo mismo con los demás temas mencionados, donde se puede ver transodio y desprestigio de las políticas públicas.
La investigación concluye que durante el mes de marzo del corriente año, los medios informaron: 36% sobre la manifestaciones y en el marco del Día Internacional de la Mujer y la opinión de figuras públicas al respecto, 26% sobre casos de violencia de género, solo un 14% emitió notas de reflexión sobre género, igualdad de género y banderas del feminismo. En los últimos lugares, el 11% sobre políticas públicas de género y 6% fueron las noticias sobre justicia y género.
Gracias a los datos aportados por la investigación, se llega a la conclusión que los medios trabajan principalmente el tema género cuando este implica manifestaciones con repercusiones en la vía pública y cuando se trata de hechos de extrema violencia. Al igual que mencionamos anteriormente, los usuarios analizados se muestran en contra de las banderas y luchas del feminismo.
Para finalizar, podemos decir que a esto nos referimos anteriormente cuando con cierta desazón decimos que queda mucho camino por recorrer. A pesar de que la Ley Micaela ya debería haber sido implementada a lo largo y ancho del país, los medios de comunicación desconocen o no se interesan en tratar los temas relacionados con la violencia de género y las disidencias de la manera correcta. El lugar que ocupa el movimiento feminista en los mismos se relaciona directamente con las molestias que ocasiona cuando las mujeres marchan y se manifiestan en la vía pública, o cuando se produce otro de los femicidios que sufrimos, actualmente, cada 22 horas. El tratamiento de la información en los medios, generadores de opinión pública, lejos está de profundizar en políticas estatales o en fortalecer la igualdad de género.
Estas cuestiones van más allá de ser un tema de agenda, de incrementar lectores, visitas, espectadores y oyentes. Por comentarios que ridiculizan y culpabilizan a las víctimas, nuestras madres, hijas, hermanas y compañeras mueren en manos de un hombre. Por expresiones homofóbicas y transfóbicas, el promedio de vida del colectivo trans no supera los 40 años. La morbosidad con la cual se tratan los casos de violencia de género, no nos deja salir a la calle teniendo la certeza de que vamos a volver. Y este año particularmente, la desinformación dejó de lado la desaparición de Tehuel De La Torre; sin él, no hay ni una menos.
Escrito por Maite Paprocki