El expresidente Mauricio Macri aseguró que este domingo estará presente en la final del Mundial de Qatar 2022 que disputarán Argentina y Francia. A pesar de que durante toda la competencia se lo tildó de portador de mala suerte, el exmandatario, que está en la competencia por ser presidente de la Fundación FIFA, acudirá al estadio Lusail, aunque no hará entrega de las medallas.
"Voy a estar ahí disfrutando, espero, de esta maravilla que nos está pasando", expresó Macri en una entrevista radial con Cadena 3 de Rosario.
El exmandatario dedicó elogios a la selección que conduce Didier Deschamps. "Francia también llega muy bien, con esa convicción de que no le vas a hacer un gol y ellos te hacen un gol en cualquier momento. Eso es lo que transmiten”, remarcó y señaló que la habilidad del conjunto galo también está ayudada por la suerte ya que el miércoles Marruecos tuvo “un tiro en el palo” que podría haber sido gol.
"Yo creo que están llegando los dos muy bien. Uno, porque fue de menor a mayor, soportó un baldazo de agua fría después de estar tantos partidos sin perder. Perder uno de esos partidos que perdés uno de cada cien", dijo sobre el primer partido de la scaloneta en la fase de grupos frente a Arabia Saudita.
"Eso trajo una hecatombe interna, se vio en el primer tiempo con México, no había una convicción. Hasta el gol de Messi. Ahí arrancó una recuperación cada vez más sólida, con un final hasta ahora que fue el partidazo con Croacia", agregó.
Sin embargo, Macri destacó las actuaciones de Alexis MacAllister, Enzo Fernández, Julián Alvares y Lionel Messi, quien está “con madurez, con confianza, con convicción, dando lo máximo y disfrutándolo".
En redes sociales, ya existe una campaña en la que buscan hacer circular la foto del expresidente posando con la remera de Francia para "yetar" al conjunto galo.
Qué piensa de las críticas a Qatar como sede
El titular de la Fundación FIFA se refirió a las críticas que hay hacia Qatar como sede del Mundial debido a las denuncias de selecciones y de distintos organismos internacionales sobre la violación de los derechos humanos en el país.
Según Macri, estos repudios fueron “una campaña poco justa, poco oportuna, porque si vos no estabas de acuerdo y creías en todas esas denuncias que se han hecho y no se han podido comprobar, no hubieses clasificado para el Mundial. Directamente no vengas".
"Yo no voy a la casa de alguien que me invita a comer para insultarlo. Si me invitan a comer voy, soy educado, le agradezco, no voy para solamente decirle que no estoy de acuerdo con un montón de cosas", opinó.
La comparación entre Argentina y Qatar
Sin tomar en cuenta las diferencias profundas sociales con Argentina y el “factor petróleo”, el expresidente argumentó que en los últimos 40 años Qatar ha progresado y sostuvo que Argentina puede tomar el mismo camino.
"Yo paraba siempre en el mismo hotel, y cuando ves la foto en los 80 era un hotel en medio de un descampado. Nosotros por políticas erróneas nos empobrecimos, ellos dejaron de lado sus conflictos y transformaron el gas y el petróleo en desarrollo. Es triste esta comparación, pero nos tiene que generar esperanza. Si ellos lo hicieron en 40 años, nosotros también podemos", dijo.
Además, afirmó que en Medio Oriente "hay un proceso de evolución en toda esta región" y que en Qatar "se puede vivir en absoluta libertad, no hay conflicto. Apuestan por poner a Doha en un lugar importante en el mundo".
Y agregó: "Qatar sigue un eje de modernización muy potente. Ellos están revolucionando la educación, todo se mide. Lo que queremos hacer nosotros en Argentina y los gremios no permiten, ellos lo hacen".
El exmandatario aprovechó para pedir que se pongan “límites a los mapuches truchos” para poder explotar Vaca Muerta. “Si ponemos límites a los mapuches truchos, no cobramos impuestos extorsivos y tenemos un solo dólar, podemos sacar gas y abastecer a toda Europa –sostuvo-. Dentro de la ley. Tenemos energía, minerales. Tenemos todo. Debemos trabajar con seriedad como Scaloni”.
“Las ideas populistas nos hicieron creer que se puede vivir sin trabajar, que la ley no importa, que es cuestión de ser amigo de los poderosos. Todos se estafan, nadie invierte, y si no hay inversión no hay trabajo. Creemos que somos vivos estafando a los que confían en nosotros, después nadie más lo hace”, dijo y aseguró que está trabajando “para que los cataríes vengan a invertir” a Argentina. “Lo que quieren es que cumplamos y no cambiemos las reglas”, finalizó.