No solo fue una noche difícil para Juan Martín Del Potro que disputó su último partido de tenis de manera profesional, sino también para Federico Delbonis. El argentino de 31 años se llevó el abucheo y los silbidos de algunos fanáticos presentes en el Buenos Aires Lawn Tennis luego de su contundente triunfo y abrió un gran debate en las redes sociales.
Los hinchas que llenaron el estadio para brindarle su apoyo al tandilense se animaron a silbar cuando su rival realizaba algunos drops durante el segundo set y se marcaron dos posturas claras. Algunos consideraban "innecesaria" la acción de Delbonis para aprovechar las limitaciones de su rival y, por otro lado, estaban las personas que defendían al azuleño porque jugó al 100%, sabiendo que era un partido oficial y no una simple exhibición.
Por eso, el propio Delbonis se vio obligado aclarar su posición y aseguró que hasta él quería hinchar por Delpo: "No me tomo nada personal lo del público. Si yo hubiera estado en la tribuna, también hubiera alentado por Juan Martín".
Sin embargo, lo polémico vino después porque el tenista sí se enojó con algunos hinchas que incomodaron el clima del partido. "La buena vibra que se sintió. Lástima por algunos, pero bueno", fueron sus primeras palabras en la conferencia de prensa post victoria.
Después, se refirió directamente al momento de los silbidos y lanzó: "Me molestaron algunos maleducados que pretenden convertir esto en una cancha de fútbol".
“Fue un sentimiento encontrado. Era el único partido en mi carrera que quería perder. No me esperaba tener el público en contra en Buenos Aires. Tal vez dividido. Pero no en contra. Ayer la fiesta para Juan Martín, yo fui como el bribón de aguar la fiesta, pero para mí, lo más importante fue que Juan Martín volvió. ”, dijo el número 44 del ranking ATP en diálogo con el programa radial Perro de la Calle.
Y agregó: “Lo único que no me gustó fueron algunos cantos o frases que fueron más allá de un aliento. Algunos casi parecían una amenaza. Yo entiendo todo el folklore que se puede vivir, como nos pasa con el fútbol, pero cuando se pasa de la línea de la falta de respeto, eso fue muy feo, no me gustó"
