En los primeros ocho meses del gobierno de Javier Milei, la economía argentina atravesó una etapa crítica marcada por una fuerte retracción en el consumo y el empleo.
Te puede interesar
Recientemente, un informe de la consultora Orlando J. Ferreres reveló cifras alarmantes que reflejan un deterioro en la inversión y la actividad económica del país.
Según el estudio, la inversión real se desplomó un 27,5% en junio, y la inversión total registró una disminución del 22,2% durante el primer semestre del año. Estos datos apuntan una tendencia preocupante en el comportamiento de los inversores, lo que podría tener implicaciones negativas a largo plazo para el crecimiento económico.
El descenso de la inversión se suma al de la industria, el comercio y la construcción
El informe también detalla que el comercio, la industria y la construcción enfrentaron una caída del 3% en su actividad económica en junio, y una reducción acumulada del 5% en los primeros seis meses de 2024.
Estos sectores, vitales para el funcionamiento económico del país, están experimentando una desaceleración que refleja el impacto de la actual gestión de Luis Caputo.
En términos más específicos, la inversión en maquinaria y equipo fue uno de los rubros más afectados. En junio, esta categoría sufrió una contracción del 25,9% en comparación con el año anterior, y el descenso acumulado en los primeros seis meses del año alcanzó el 18,2%.
Por otra parte, la inversión en equipos nacionales cayó un 9,8%, mientras que los equipos importados se vieron aún más perjudicados, con una caída del 40,7%.
El sector de la construcción también está atravesando tiempos difíciles. En junio, la inversión en este sector se redujo en un 28,8% en comparación con el mismo mes del año anterior. Esta caída es más pronunciada que en los meses previos y resulta en una disminución acumulada del 25,5% durante el primer semestre.
La industria metalúrgica no encuentra la recuperación en “V”: cayó un 17,3% interanual en junio
La actividad metalúrgica registró, durante el mes de junio, una contracción en términos interanuales de -17,3%. Así lo reveló el Departamento de Estudios Económicos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA) en su último informe. Se trata de la mayor caída registrada en junio desde la pandemia de COVID-19.
En comparación con el mes anterior, el sector disminuyó su producción en -1,9%, lo que profundiza aún más la tendencia negativa del sector y el duro momento de plena recesión que atraviesa el país, aunque el Gobierno quiere explicar que se está viendo una recuperación.
Durante el primer semestre del 2024, el sector cayó -16,7% si lo comparamos contra el primer semestre del 2023. Por otro lado, la caída desde diciembre del 2023 asciende a -11,2%. Si se toma como referencia diciembre de 2023, la caída acumulada es del 11,2%. Se suma a datos de mayo de la UIA que muestran que todo el entramado industrial sigue en retroceso.
La utilización de la capacidad instalada también mostró una fuerte contracción, ubicándose 12,2 puntos porcentuales por debajo de junio de 2023 y 11,2 puntos porcentuales menos que el promedio de 2023. Este dato refleja la subutilización persistente de los recursos disponibles en la industria.
Se profundiza la caída de la actividad metalúrgica: el análisis sectorial
El análisis sectorial de ADIMRA reveló caídas sistémicas en todos los subsectores de la industria metalúrgica, con disminuciones que varían entre el 10% y el 25%.
Las empresas proveedoras de las cadenas de valor de la construcción -muy afectada estos meses-, consumo final y automotriz fueron las más afectadas, con caídas de hasta el 30%. Por otro lado, las empresas vinculadas a los sectores de petróleo, gas y minería mostraron los mejores desempeños relativos, aunque no lograron crecer en comparación con el año previo.
El sector que menos cayó durante junio volvió a ser Maquinaria Agrícola, con algunas empresas que han comenzado a crecer luego de los muy bajos niveles de producción registrados el año previo producto de la sequía. Sin embargo, sigue con caídas muy fuertes y acumula más de un año sin crecer de forma interanual.
Por otro lado, el sector que más cayó durante el mes de junio ha sido el de Fundición, seguido por Otros Productos de Metal y Equipos y aparatos eléctricos.
En cuanto al nivel de empleo, se observa una disminución interanual de -2,8%. Si comparamos contra el mes de mayo, el empleo disminuyó -0,1% registrando otra leve desaceleración con respecto a los meses anteriores. Esto va en sintonía con los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), donde revelaron que entre noviembre de 2023 y abril de 2024, más de 137.000 personas que tenían un empleo registrado, lo perdieron como consecuencia de la caída de la actividad económica y de las políticas de ajuste implementadas.