El mercado de pases en el fútbol argentino comienza a moverse de manera más activa. Con los objetivos y el calendario ya dispuesto por la organización, los clubes buscan reforzarse para llegar lo más lejos posible en todas las competiciones. Uno de esos equipos es San Lorenzo, quien afronta las primeras semanas con Marcelo Moretti como su nuevo presidente, tras imponerse en las elecciones del 18 de diciembre, para ser el reemplazante de Horacio Arreceygor.
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En la noche del sábado, se confirmó una importante noticia para los hinchas del Ciclón: Cristian Tarragona, de último paso por Gimnasia, llegó a un acuerdo para sumarse al plantel de Rubén Darío Insúa. El contrato del delantero en el Lobo finaliza este domingo 31 de diciembre y firmaría en el elenco azulgrana hasta el 31 de diciembre de 2024. Cabe destacar que el club de Boedo está inhibido, por lo que las contrataciones podrían cerrarse una vez que la misma se levante.
La inhibición en San Lorenzo, por el caso Gordillo
Por una importante deuda con Yeison Gordillo, el club fue sancionado por la FIFA y no podrá realizar incorporaciones durante esta ventana de transferencias hasta llegar a un acuerdo para saldarla. El comunicado del ente madre llegó este jueves a las oficinas. Gordillo había arribado al elenco de Boedo a principios de 2021, a cambio de 1.200.000 dólares por el 80% de su ficha. Un año y medio después. el colombiano se marchó a través de una rescisión de contrato y firmó con Junior. Por una importante deuda, había acordado un plan de pago con los dirigentes de la anterior gestión que no fue cumplido.
Por esta razón, se avanzó con la inhibición por parte del futbolista que responde a esa deuda de 1.500.000 dólares más intereses, según informó el periodista César Luis Merlo. La notificación había llegado en octubre y ahora la nueva Comisión Directiva deberá trabajar para que el Gallego Insúa pueda tener refuerzos para el plantel.
