Los futbolistas de Vélez, Sebastián Sosa, José Florentín, Abiel Osorio y Braian Cufré, están siendo investigados por presunto abuso sexual contra una mujer periodista de 24 años y en las últimas horas la causa sumó nuevas pruebas.
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Sucede que, a poco tiempo de conocerse la denuncia, se filtraron los chats entre el arquero del Fortín y la denunciante, contenido que complica aún más a algunos de los imputados.
La Justicia, que por orden de la fiscal María Eugenia Posse le prohibió a los futbolistas salir del país, al menos en los próximos 90 días, ahora evalúa nuevas evidencias vinculadas a los mensajes previos y posteriores al presunto abuso, mientras que se espera la declaración la víctima en Cámara Gesell para el próximo lunes.
Cabe recordar que los jugadores son acusados por un hecho que habría ocurrido durante la noche del sábado 3 de marzo, mismo día del partido que disputó el Fortín contra Atlético Tucumán en el estadio Monumental José Fierro, por la octava fecha de la Copa de la Liga Profesional.
Hasta ahora el caso tiene la declaración de la víctima, quién narró cómo conoció al arquero Sebastián Sosa en la zona mixta tras el partido y cómo se contactaron vía mensaje privado de Instagram para verse por la medianoche. Ya en el hotel, según contó ella, empezó a beber de tragos que los futbolistas le habían ofrecido y después se sintió mal y fue abusada. E
En la notificación que hizo la Justicia a los jugadores hay una diferencia en la acusación contra Sosa y el resto: éstos últimos están marcados como coautores y el arquero como partícipe, ya que facilitó el encuentro pero después no participó de la situación de presunto abuso, aunque sí estaba en la habitación aunque su defensa dice que dormido, algo que los chats incorporados podrían desmentir.
El primer chat se da antes de que ella concurra a la habitación 407 del hotel Hilton. Ahí queda claro que Sosa le avisa que está con otros tres compañeros pero también que ella no tiene intención de tener relaciones con más de una persona. De hecho deja explícito que está acostumbrada a estar rodeada de hombres pero le aclara taxativamente que no se desubiquen.
Después hay otro intercambio de mensajes cuando ella se retira aproximadamente a las 5:30 de la mañana. Allí, Sosa le señaló a la joven periodista la importancia de que tome "la pastilla del día después", ya que José Florentín jugador que presuntamente abusó de ella, no había utilizado preservativo: “No está seguro de haberlo usado en todo momento”.
Casi 12 horas después, el tono de los mensajes fue totalmente diferente y la acusación es directa: “Conozco mis límites y sé que ayer los puse y ni él (por Florentín) ni el otro (acá no se especifica si es Cufré u Osorio) pararon”. Después da algunos detalles que acá se prefieren pasar por alto para no revictimizarla pero claramente deja establecido que “estaba ida”.
Luego, la joven desliga de responsabilidad al arquero y denuncia lo ocurrido con los otros tres futbolistas: "Está bien, Seba, vos no hiciste nada. No te voy a hacer cargo de lo que no te corresponde (…) Lo odio, se fue a la mierda, eso no se le hace a ninguna mujer, nunca (…). Lo que hicieron ayer fue muy fuerte, no me lo merecía". Y en otro mensaje detalla: "Me agarraron entre tres, uno por abajo de la cama, el otro de parado. Fue terrible, creo que ni ellos están dimensionando. Yo me acuerdo clarito que me lo sacaba al paraguayo y no podía hacer mucha fuerza"
"Estaba totalmente perdida, me levanté y me cayó sangre por los tobillos, tuve que ducharme”, relató la denunciante. "¿Qué pensaron, que me podían hacer lo que querían por esa miseria?", escribió.
El próximo lunes a las 10 de la mañana es el momento clave. Ese día y a esa hora se hará la Cámara Gesell a la víctima y los cuatro jugadores de Vélez acusados de abuso sexual agravado empezarán a conocer su verdadero futuro. Si es la cárcel o si pueden tener algún resquicio en la defensa sobre el aberrante delito que los tiene en la mira. La fiscal del caso tendrá 48 horas para definir si los detiene o no.
