La segunda semifinal de la Copa América 2024 entre Uruguay y Colombia terminó con un verdadero escándalo en el Bank of America Stadium de Carolina del Norte.
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Luego de una discusión caliente en el campo de juego entre los futbolistas de ambos equipos, la violencia se replicó en las tribunas y todo terminó en una verdadera batalla campal que se destacó por la nula intervención policial.
Las imágenes comenzaron a viralizarse en las redes sociales: jugadores del seleccionado charrúa, a las trompadas con algunos hinchas del equipo cafetero. Piñas de un lado y del otro, una situación pocas veces vistas en un terreno de juego.
Cuando el 1-0 quedó sellado y Colombia se clasificó para la final, los dos planteles se trenzaron en la mitad del campo con Luis Suárez como uno de los más exaltados y Marcelo Bielsa, intentando separar. Si bien en ese momento no se conoció qué sucedió para que todo terminara de esa manera, lo que vendría después fue muchísimo peor.
Cuando el tumulto comenzó en una de las tribunas cercanas al banco de suplentes, algunos futbolistas de Uruguay treparon y subieron a donde estaban sus familias para proteger a sus seres queridos.
Con la presencia de solo dos policías, Darwin Núñez comenzó a tirar piñas y a enfrentarse con hinchas del equipo rival. El delantero del Liverpool era uno de los más exaltados, nadie lo podía controlar.
En el altercado también se lo vio a Ronald Araujo, futbolista del Barcelona quien no pudo estar presente en el partido por una lesión.
La situación recordó a la última visita de la Selección Argentina a Brasil por las Eliminatorias Sudamericanas, cuando los jugadores fueron a proteger a los hinchas que eran golpeados y terminaron a los empujones con la policía.
Las razones que habrían provocado la pelea en las tribunas:
Luego de lo sucedido y cuando las cosas lograron calmarse un poco, José María Giménez, capitán de los charrúa en la semifinal, contó que los familiares que se encontraban en un sector del estadio sufrieron agresiones y ahí comenzó la penosa situación.
“Por favor, tengan cuidado. Las familias están en la tribuna”, comenzó el relato de Giménez y explicó que hubo “una avalancha” de los hinchas de Colombia. “Esto es un desastre, nuestras familias corriendo peligro”, agregó.
“Tuvimos que sacar a los seres queridos, con bebés recién nacidos, no había policías… Ojalá que tengan un poco más de cuidado con la familia, la gente y los alrededores de los estadios”, afirmó el defensor y apuntó: “No saben tomar, se comportan como unos niños, no son decentes. Es un desastre”.
Posteriormente, el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Ignacio Alonso, contó cómo se desató la violencia entre los futbolistas y los hinchas. “Simplemente fueron a proteger a su familia. Hubo una reacción natural, instintiva, de padre, de esposo, de hermano, de hijo que al ver a su familia en un momento muy complicado y al ver que no permitían la evacuación hacia la cancha, que es lo que el protocolo indica”, explicó el dirigente ante los medios.
“Estaban rodeados, se trancó el acceso a la cancha y en ese momento quedó muy encerrada la gente que además estaba rodeada de una cantidad impresionante de hinchas colombianos y que algunos, como bien dijo José María Giménez, tuvieron una actitud agresiva con ellos y se dieron después unas escaramuzas que algunas personas tuvieron que salir a cortar”, aseveró. “Luego aparecieron cuando lo notaron algunos jugadores uruguayos a tratar de proteger a sus familias. Se agravó la situación, pero creo que es una reacción natural al percibir lo que estaba pasando”, completó.
Por otro lado, contó que la AUF tiene un Departamento para analizar lo sucedido y que también los dirigentes fueron agredidos. “Nosotros también sufrimos un intento de invasión del palco, tiraron cosas, dijeron cosas, tuvimos que hacer entrar niños al palco. Pero fueron unos minutos y listo. Hay que ver las imágenes, conversar y evaluarlas”, concluyó.
