A seis meses de su primera internación, la salud de Jorge Lanata sigue siendo un tema recurrente en los medios de comunicación. En medio de mucha preocupación e incertidumbre, en las últimas horas se conocieron nuevas complicaciones que retrasan cada vez más la recuperación definitiva del periodista.
Te puede interesar
El conductor está internado en el Hospital Italiano desde el 14 de junio pasado, y en ese lapso de tiempo su cuadro fue variando, entre algunas mejoras y otras recaídas que pusieron en riesgo su vida.
En los últimos días, se venía especulando con un posible traslado a una clínica de neurorrehabilitación; sin embargo, su estado empeoró y los médicos postergaron la decisión. En este panorama, en la mañana del jueves, su esposa Elba Marcovecchio dio detalles de la situación actual del periodista.
Sin partes médicos oficiales en el último tiempo, la palabra de la abogada cobra particular importancia en este contexto. "Jorge tiene una trombosis desde hace unos días. No es grave eso. Estuvo sin fiebre, pero tiene una infección que los médicos tratan”, afirmó desde la puerta del Italiano, donde la esperaba una guardia de prensa.
“Está en el mejor lugar y muy bien tratado. Todos estamos con mucha fe”, continuó la abogada, quien en reiteradas oportunidades elogió al personal médico de la institución. “Está en excelentes manos, los médicos anticipan cada una de las cosas. Acá le salvaron seis veces la vida”.
Además, Marcovecchio se refirió a los inconvenientes en el traslado a Santa Catalina, donde su marido ya estuvo en dos oportunidades en este tiempo con el objetivo de recuperarse físicamente. “En la clínica de rehabilitación necesitan un paciente estable, por lo que Jorge tiene que llegar a ese estado para eso. Él está en camino a eso”, aventuró.
En relación con la situación actual de su marido, Marcovecchio aseguró que “el proceso infeccioso genera que esté más dormido. Sigue en terapia intensiva y eso hace que esté las 24 horas monitoreado”. En este sentido, ratificó las palabras que viene repitiendo casi desde el momento mismo de la internación: “Esto es un día a día, lo he dicho siempre. Estas cosas aisladamente no es que son sumamente graves, sino que al estar tanto tiempo acá genera cualquier cosita"
Por su parte, Bárbara, la hija mayor del periodista, explicó que a su padre le hicieron una tomografía "porque decía que le dolía la panza". En ese momento, los estudios detectaron "un poco de líquido" en el abdomen y debieron hacerle una punción y luego colocarle un drenaje.
"Tiene una trombosis en un brazo por tantas vías e inyecciones, pero se soluciona con anticoagulante. No tiene fiebre, los drenajes ya casi no sacan líquido, la presión la tiene perfecta y las pulsaciones bien”, le explicó a Infobae.